El secretario de Gobierno, Juan Aguilar, se reunió con el jefe del servicio, Cristian Otero, para interiorizarse de las acciones del cuerpo y conocer la incorporación de nuevas unidades. Surgió, del encuentro, la necesidad de recaudar fondos a partir de la demanda de los vecinos y el crecimiento demográfico de la ciudad. 

La incorporación del canon responde a ofrecer a la comunidad “mayores niveles de seguridad, protección y auxilio”, expone el texto. Además es retribuir a los bomberos el esfuerzo marcado en cada intervención con un propósito: resguardar la integridad del vecino. Lo revelan las cifras: en 2015 hubo 1.315 intervenciones en incendios de pastizales, campos, o igniciones en contenedores de basura o en la vía pública. Y los valores no se actualizan desde el 2 de julio de 2015, esgrime el escrito.

El proyecto propone en su artículo 1 facultar a la Asociación de Bomberos Voluntarios a efectuar tareas de relevamiento y pruebas de las condiciones operativas de todas las instalaciones de prevención contra incendios existentes en el ejido de Trelew. Además de la obligatoriedad de intervención para aquellos locales de más de 100 metros cuadrados, como paso previo a su habilitación comercial.

El Canon General por Intervención –como se denominará el ítem-, podrá ser reducido cuando la Asociación lo considere, marca el artículo 7 de la ordenanza. El apartado 9 exime del pago del Impuestos Inmobiliario y Tasas de Servicios a los integrantes del cuerpo, con una antigüedad en la actividad no menor a un año. Y si el servidor público tiene más de un inmueble, la eximición se aplicará sobre aquel inmueble que él decida.