El dengue es un problema de salud pública en buena parte del mundo, que todos los años padecen millones de personas, genera miles de internaciones y colapsa los sistemas de salud de los países.

En la Argentina, desde la reemergencia en 1998 de esta enfermedad transmitida por la picadura del mosquito Aedes aegypti, todos los años se registran brotes.

Las únicas excepciones fueron en 2001 y 2005, en tanto que la peor situación se produjo en 2009, cuando hubo en el país más de 26 mil casos de dengue.

Luego de esa epidemia, la mayor cantidad de casos ocurrió el año pasado, cuando alrededor de tres mil personas contrajeron la enfermedad.