Esta semana se realizó, en la Cámara de Diputados de la Nación, la nueva presentación del Proyecto de Ley sobre interrupción voluntaria del embarazo.
Elaborado por la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito, fue presentado y debatido en diversos ámbitos: universidades, sindicatos, organizaciones de mujeres y de derechos humanos y lleva la firma de 70 diputados y diputadas de distintos bloques políticos.
En un clima de gran expectativa, los participantes de la mesa –legisladoras y legisladores de casi todos los bloques políticos y hombres y mujeres de diversas agrupaciones sociales- resaltaron que este proyecto es fruto de las luchas que se vienen llevando a cabo desde hace muchas décadas y que cuenta, en los últimos tiempos, con mayor visibilidad pública, lo que genera una perspectiva positiva para que logre su aprobación en el presente período legislativo.
La propuesta despenaliza y legaliza la práctica en las primeras doce semanas de gestación y más allá de ese plazo, cuando corre riesgo la vida o la salud de la mujer, en casos de violación y si el feto tiene malformaciones graves. Prevé además que la atención sea realizada en hospitales públicos y también tenga cobertura por obras sociales y prepagas. Y no establece ningún requisito más que la voluntad de la mujer de llevar adelante esa decisión.
Según los fundamentos del proyecto: Se estima que en Argentina abortan clandestinamente más de 500 mil mujeres al año, lo que demuestra que la penalización de esta práctica no resuelve el problema, y que el mismo no se restringe al terreno moral o religioso, sino que se trata de un tema básico de salud pública. Las complicaciones ocurridas en la realización de abortos inseguros, que están fuera del sistema de salud, constituyen la primera causa de mortalidad materna en nuestro país.
Asimismo, esta iniciativa se enmarca en el reconocimiento de los tratados internacionales de Derechos Humanos que nuestro país adhiere, para garantizar el derecho a la vida, a la igualdad y no discriminación, a la intimidad y a la autonomía reproductiva, a la libertad de conciencia y religión, entre otros.
Salvo el Frente Renovador, diputados de todos los bloques respaldaron el proyecto.
Por el Frente para la Victoria: Adela Zegarra, Juliana Di Tullio, Diana Conti, Adriana Puiggros, Araceli Ferreira, Andrea García, Horacio Pietragalla Corti, Mónica Gutiérrez, Héctor Recalde, Jorge Rivas, Gloria Bidegain, María del Carmen Bianchi, Edgardo Depetri, Silvia Scotto, Leonardo Grosso y Mario Oporto. Gastón Harispe, Remo Carlotto, Liliana Ríos, Verónica Magario, Ana Gaillard, María Eugenia Zamarreño, Liliana Mazure, Hernán Avoscán, Josué Gagliardi, Jorge Barreto, Gladys Soto y Mara Brawer.
También firmaron el proyecto: Carlos Raimundi, Carlos Heller y Juan Carlos Junio, de Nuevo Encuentro. Por la UCR: Manuel Garrido, Miguel Bazze, Eduardo Santín, Fabián Rogel y Enrique Vaquié; por el Socialismo: Juan Carlos Zabalza, Alicia Ciciliani, Omar Barchetta, Elida Rasino, Ricardo Cuccovillo, Gabriela Troiano y Roy Cortina; por Unidad Popular lo hicieron: Claudio Lozano, Víctor De Gennaro y Antonio Riestra.
Desde el GEN suscribieron la iniciativa Margarita Stolbizer, Virginia Linares y Fabián Peralta; por el Frente de Izquierda: Nicolás del Caño, Néstor Pitrola y Pablo López; por el Frente por la Inclusión Social: Ramona Pucheta; por el Pro: Laura Alonso; por Libres del Sur: Victoria Donda; por Proyecto Sur: Alcira Argumedo; y por el frente UNEN: Carla Carrizo.
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