“Hay casos que fichan, están un rato y se van”, ejemplificó una fuente, quien mencionó casos de médicos que “dicen trabajar 36 horas y hacen nueve, cuando terminan cobrando las 36 horas”.

“Es la realidad, esto ocurría años atrás. Alguien firmaba 36 horas sabiendo que hacían menos. No es sólo culpa del personal médico. Se trabajaba de esa manera”, se destacó a este medio.

Por ese motivo, desde la comuna se está llevando adelante una serie de procedimientos para garantizar los servicios, algunos con demoras producto de este asunto. El Gobierno busca renegociar los vínculos con los profesionales con el fin de que continúen trabajando en el CEMA pero con contratos acordes a su cumplimiento laboral. Es decir, aquellos médicos, por ejemplo, que puedan trabajar 12 horas semanales, ofrecerles un contrato hasta esa determinada cantidad de horas y no más de esa posibilidad. En tanto, no se descartan renuncias ante esta medida del Municipio, que ya ha planteado el tema en los primeros meses del año.

El propio secretario de Salud, Gustavo Blanco, había indicado una serie de irregularidades en el otorgamiento de turnos, entre otras faltas de supervisión o negligencias de las anteriores autoridades.