“El impacto de la inflación y de la inestabilidad cambiaria tiene su correlato en los créditos Uva. Sólo entre los meses de abril y agosto de este año dichos préstamos registraron un aumento del 10,8 por ciento en la cuota”, remarcó Fernanda Raverta, Diputada Nacional de Unidad Ciudadana. Las declaraciones surgieron en el marco de una actividad realizada en el Congreso de la Nación en la que los diputados de la oposición plantearon diversas acciones legislativas para amortiguar la situación de quienes accedieron a esas líneas de financiamiento para la vivienda propia y hoy ven comprometido su pago. Varias familias marplatenses se verían afectadas.

 

“Los tomadores de créditos U.V.A´s reciben del banco una determinada cantidad de U.V.A.´s que además de tener un interés propio del banco, varían su valor en relación directa con la inflación. Aún cuando existen cláusulas que indican que la cuota a pagar no puede superar un determinado porcentaje del salario de aquel que recibió el préstamo y que en tal caso se renegocian los plazos de pago, capital e intereses, en los hechos el desfasaje entre salarios e inflación es tal que la deuda se torna impagable en su monto y eterna en sus plazos”, explicó la diputada Raverta, en la jornada de la que participó una docente marplatense que se mostró muy preocupada por la incertidumbre que genera la situación.

 

“Desde Unidad Ciudadana presentamos proyectos para que los montos de las cuotas ya no se ajusten por UVA sino que contemple la variación de los salarios”, sostuvo Raverta y remarcó que “para dar una respuesta a la urgencia es primordial proteger a todos aquellos que de una u otra manera están comprometidos con estos créditos y se ven afectados por la política económica actual”

 

“Se calcula que en la actualidad hay alrededor de 130 mil créditos otorgados por cientos de millones de dólares, y la realidad del desmanejo en la economía nacional en favor del modelo de acumulación financiera hizo que las cuotas se tornen impagables y con un pronóstico que lejos de mejorar empeora las perspectivas de mediano plazo con estimaciones “optimistas” de una inflación del 42% y otras como las del CitiBank que la ubican alrededor del 50%” sentenció Raverta.