El recorte en los recursos que administran los municipios y las pautas fiscales para 2018 comenzaron a discutirse ayer en la gobernación bonaerense, durante un encuentro citado formalmente por María Eugenia Vidalpara felicitar a los intendentes de Cambiemos por el fuerte posicionamiento en las últimas elecciones.

La reunión de Vidal con más de 70 jefes comunales del oficialismo se concretó un día después de que éstos se reunieran con legisladores del Frente para la Victoria y del PJ para expresar su malestar por las leyes de responsabilidad fiscal y de presupuesto.

"La ley de responsabilidad está bien. Es necesaria para que los municipios funcionen correctamente. Pero a algunos que heredamos una deuda tremenda se nos va a complicar, ya que aún no tenemos las cuentas equilibradas", dijo a LA NACION el intendente de General Pueyrredón, Carlos Arroyo.

Arroyo heredó de la gestión anterior una deuda de $ 1300 millones y aún no tiene las cuentas equilibradas. La ley de responsabilidad fiscal obliga a los intendentes a tener los números en orden para recibir financiamiento. Otros recortes de fondos inquietan a los alcaldes, que ayer brindaron con Vidal por el triunfo electoral.

"Hay preocupación entre los intendentes por la forma en que se va a repartir el fondo educativo", dijo a LA NACION el intendente de Florentino Ameghino, Calixto Tellechea. Este fondo sufrirá tres cambios: el 85% se afectará a infraestructura escolar -no será de libre disponibilidad, como hasta ahora-, estará coordinado por la Secretaría de Gestión Territorial, según un plan de prioridades y urgencias, y se elaborará un índice, que tomará en cuenta la vulnerabilidad de la comuna, la cantidad de edificios escolares y la matrícula del distrito, para el reparto de fondos. Los dos temas se discutieron por lo bajo entre los intendentes, reveló Tellechea.

No todos los jefes comunales expresaron sus reparos en público. Algunos, como Julio Garro, quien enfrenta en La Plata una abultada deuda con proveedores, se retiraron sin hacer declaraciones. Vidal instó a los jefes comunales a seguir trabajando "sin perder de vista que se representa a los bonaerenses".

Los intendentes peronistas fueron los primeros en alertar por las leyes de presupuesto y de responsabilidad fiscal e impositiva, enviadas a la Legislatura. Los más críticos objetan el alto endeudamiento, las limitaciones para ejecutar el fondo educativo que gira la Nación, las atribuciones que el pacto fiscal le da a la provincia -advierten que recorta la autonomía municipal- y la exclusión del Fondo de Infraestructura para las comunas.

"Nos preocupa que Vidal lleva $ 136.000 millones de deuda acumulada y vuelve a pedir más endeudamiento", objetó la intendenta de La Matanza, Verónica Magario, en una reunión con senadores y diputados del peronismo.