Lo cerraron en la noche del lunes. También aceptaron la vuelta de Olmos y sumar al Evita y otros espacios.
El PJ porteño llegó en la noche del lunes a una inesperada unidad luego de la firma de "la paz" entre La Cámpora y los otros sectores del peronismo, encabezados por el titular del partido, Víctor Santa María.
Luego de meses de desencuentros, los peronistas porteños se reunieron en la sede del partido para celebrar un Congreso Metropolitano, presidido por Mariano Recalde y determinaron que tanto los camporistas como el resto del universo peronista porteño competirá en las primarias de agosto.
Hasta el momento La Cámpora era reacia a permitir el ingreso a las PASO del FPV de otros sectores, lo que había propiciado un fuerte enfrentamiento interno con Santa María.
Sin embargo, luego de que Cristina Kirchner bajara la línea de unir al peronismo en todos los distritos hasta donde se pueda, ahora los camporistas participaron de la firma de la tregua e incluso aceptaron sumar a figuras que habían roto con el kirchnerismo, como Alberto Fernández y Juan Manuel Olmos, que estaban trabajando junto a Sergio Massa.
Del mismo modo, aceptarán sumar a figuras y espacios ajenos al PJ, como el legislador del Papa, Gustavo Vera y dirigentes de centroizquierda como Claudio Lozano.
La cumbre significó una suerte de reconciliación entre "la orga" de Máximo Kirchner y el Movimiento Evita, que envió representantes a la cumbre de este lunes.
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