Dos hermanos policías, uno de la Bonaerense y otro de la Metropolitana, quedaron detenidos ayer por el episodio en el que el domingo terminó con un tiro en la cabeza Eric Milton Ponce (29), un hecho que derivó en desmanes y destrozos ante la Comisaría 49a. de Villa Urquiza por parte de vecinos y allegados a la víctima, como anticipó Clarín ayer, en exclusiva.

Cerca de las 8 de la mañana, David César Cabaleiro, 35 años, sargento de la Comisaría 2a. de Martínez, San Isidro, se entregó y fue detenido en Tribunales. Si bien aún no fue imputado formalmente, es el principal sospechoso de haber baleado a Ponce, en un hecho que, según las primeras declaraciones de testigos a la Justicia, habría empezado como una broma y terminó como un aparente caso de gatillo fácil. El hermano mayor del efectivo bonaerense, José Luis, es oficial de la Policía Metropolitana y también está por ahora preso, al menos hasta tanto se determine con certeza qué rol tuvo cada uno en la secuencia ocurrida en Plaza Alberdi, en el barrio de Saavedra.

Según los testimonios recogidos por la fiscalía de ese barrio, el incidente se desató cerca de las seis de la tarde del domingo. Ponce y sus amigos paran siempre en la Plaza Alberdi. Esa tarde estaban allí, apoyados en el auto de un hombre que participaba, junto a los hermanos Cabaleiro, de una fiesta de comunión en un salón frente a la plaza. Al parecer, uno de los jóvenes de la plaza le dijo a esta persona, según declararon testigos, “te cuidamos el coche, danos 20 pesos”. De acuerdo a la percepción de los testigos, el hombre “entendió que era una broma” y entró al salón. Pero a la media hora aparecieron los hermanos policías y se pusieron a discutir con Ponce y su grupo.

Según contó Marcelo, amigo de la víctima, se acercaron de mala manera y con insultos. Ponce respondió y se agarraron a trompadas entre varios, los Cabaleiro y los del grupo de la plaza.

“Mirá que tengo un fierro”, contó Marcelo que avisó uno de los hermanos policías, aparentemente David César, y admitió que él le respondió: “Sacá y tirame”. De acuerdo con el relato de este testigo, la pelea continuó y tanto Marcelo como Ponce cayeron al suelo.

“Ahí fue cuando este hombre sacó el arma, apuntó y le disparó a Milton a matar, con una frialdad que nunca vi en mi vida ”, relató el amigo de la víctima. Aparentemente, los acusados no se habrían identificado como policías, ni durante la pelea ni cuando uno de ellos mostró la pistola.

Después del disparo, los amigos del hombre baleado lo subieron a un auto y partieron hacia el Hospital Pirovano, ubicado a pocas cuadras. Mientras tanto, la hija de la dueña del salón de fiestas alertó a la Policía Federal a través del 911 y un patrullero llegó a los pocos minutos. Allí, un efectivo se habría encontrado con uno de los hermanos Cabaleiro (sería José Luis) quien le dijo al colega que no había pasado nada, que había un herido por una pelea a trompadas pero que ya estaba todo arreglado, y el efectivo de la Federal se fue. “Lo durmieron”, admitió ayer a Clarín una fuente del caso. Esa situación habría motivado la ira (y los posteriores destrozos) del grupo de amigos de Ponce, quienes vieron cómo llegaba y se iba el patrullero. Según las fuentes policiales, enseguida confirmaron que en el Pirovano había un herido de bala y volvieron al lugar donde pudieron identificar el auto en el que iba uno de los Cabaleiro, aunque ya no los encontrarían.

Se espera que la Justicia haga hoy una rueda de reconocimiento para sumar pruebas con las que se pueda determinar qué roles tuvieron los hermanos policías. De acuerdo a lo que le dijo ayer a Clarín una alta fuente de la Metropolitana, José Luis Cabaleiro informó a sus superiores que él no llevaba el arma reglamentaria. “Nunca lo hago cuando salgo con mi familia”, habría comentado. No obstante, se le abrió un sumario administrativo y su arma fue entregada a la Justicia. Una versión indicaba que a José Luis se lo habría visto el domingo en la puerta del salón intentando esconder el casquillo de la bala, pero fuentes judiciales dijeron que por ahora no hay testimonios sobre eso. Sí están buscando imágenes en las cámaras de seguridad de la zona.

Si decide declarar, David César Cabaleiro, que fue suspendido en sus funciones por el Ministerio de Seguridad bonaerense, daría una versión diferente de la que contaron los amigos de la víctima: su estrategia apuntaría a que el disparo fue producto de un accidente.

Como sea, Milton Ponce seguía anoche peleando por su vida en el hospital, en “coma inducido”.