TUCUMÁN (Especial).- Jonathan Gabriel está en perfecto estado de salud, pesa 3,5 kilos y mide 50 centímetros. Sin embargo, los momentos previos a su llegada fueron de extrema tensión.

Según relata La Gaceta, su madre entró en trabajo de parto el domingo, cursando la semana número 40 de embarazo en su precaria vivienda de Martín Bhero al 1.300, debajo del puente de la autopista.

No hubo tiempo de trasladarla. Apenas tuvo tiempo de llamar al servicio de emergencias médicas 107 pero no se pudo esperar a la ambulancia.

Cuando los policías Jonnatan Zambrano, Jorge Jiménez y Héctor Bulacios entraron a la casilla, Mercedes Miranda, madre de otros 11 niños, estaba a punto de dar a luz. 

"Como vimos que la ambulancia no iba a llegar a tiempo, sacamos el botiquín de la patrulla, nos pusimos los guantes y esterilizamos una tijera", contó Zambrano a La Gaceta.

"El nene nació rápido, yo lo recibí, lo tomé entre los brazos y cortamos el cordón umbilical. Lo cubrimos con una manta muy humilde que nos acercó un vecino de la mamá y los trasladamos con rapidez hacia la Maternidad. La mujer fue llevada en otra patrulla hasta allí en otro vehículo", contó a continuación. 

El bebé llegó en buen estado de salud y su madre también. Mercedes comentó que llamará al niño Jonnatan Gabriel, en agradecimiento a los policías que la asistieron en el parto.  

"Fue muy emotivo, tuve un poco de miedo pero recibimos capacitación para situaciones como esa y me sobrepuse. Fue increíble, a ninguno de los policías que estuvimos esa noche nos ocurrió algo similar. Por suerte, salió todo bien", relató Zambrano.