"En este país se perdió la cultura del trabajo. Yo no puedo entender que me obliguen a cerrar el negocio y me quieran multar por trabajar", dijo Medina a Maracó Digital.

Según el texto de la ley, los negocios que superen los 40 metros cuadrados, entre otras condiciones, deberán cerrar sus puertas. El Centro Empleados de Comercio de General Pico y demás cámaras y sindicatos celebraron dicha sanción. Pero algunos comerciantes de la ciudad entienden que es una medida arbitraria y anticonstitucional.

"Nadie me puede prohibir que trabaje. Es mi negocio, estoy en mi casa y el domingo abro", anticipó el propietario del autoservicio ubicado en calle 24 casi esquina 33.

"Los domingos no tengo empleados, abro yo porque vivo acá y me genera un ingreso económico importante. Es el día en el que la gente come asado y a mí, en lo personal, me representa el trabajo de media semana", agregó.

Rubén Medina comenta que hace 30 años que se dedica a dicha actividad y que siempre abrió sábados, domingos y feriados. "El 1º de mayo Pamar cumplió 30 años en Pico. Hoy tenemos un local de 70 metros cuadrados y abrimos todos los días. Tengo 55 años de edad y laburo desde los 10", sostuvo.