El ministro de Desarrollo Social de la Provincia, Roberto Acosta, se refirió a los índices de pobreza e indigencia revelados por el INDEC esta semana como números "más que preocupantes". El funcionario señaló que a las estadísticas hay que analizarlas no sólo como números sino como "ciudadanos argentinos".

De esta forma, el ministro aseguró que estos porcentajes son el resultado de "políticas que no están siendo bien ejecutadas" en la atención a las necesidades de los sectores más vulnerables.

"Lo peor que le puede pasar a un país es reconocer los números de pobreza y no generar políticas para incrementar la igualdad y mejorar la calidad de vida de los ciudadanos", analizó.

Acosta valoró la difusión de estos índices aunque agregó que "también es importante discutir de qué manera se va a resolver esta cuestión". "La realidad que hoy tenemos en cuanto la pérdida del valor adquisitivo y consecuentemente de consumo, surge cuando las políticas que atienden a los trabajadores no son ejes primordiales", reiteró.

En cuanto a la situación provincial, el ministro aseguró que desde el Gobierno provincial "se hizo un gran esfuerzo para mejorar el salario y sostener el poder adquisitivo" ya que "para nosotros es importantísimo que no haya pérdida de consumo".

En ese contexto, Acosta lamentó que desde el gobierno nacional se hayan tomado medidas en materia económica que "desfavorecen a los que menos tienen" y mencionó como ejemplo "el tarifazo" y "la paralización de la obra pública". "La construcción es un motor dinamizador de gran parte de los trabajadores y es necesario reactivarla", agregó.

El funcionario analizó que la falta de trabajo podría causar una "rotura del tejido social": "esto implica que las familias entran en crisis por la situación económica, los chicos pierden la atención sanitaria y educativa, entre otros derechos, y es un aspecto muy difícil de corregir", consideró.

Finalmente, reiteró que la provincia no es "independiente" y que necesita el apoyo económico de la nación. Por esa causa, aseguró, "el gobernador se puso al frente y ha hecho un gran esfuerzo para activar las políticas con el gobierno nacional, para aceitar mecanismos para que tengan una mirada hacia la provincia".

"Las políticas de la provincia se mostraron activas con distintas herramientas, trabajando con comerciantes, pymes industriales y el Banco del Chaco, pero no es suficiente si no es acompañado por una política nacional que tenga la mirada puesta en el Chaco y el norte con obras estratégicas", concluyó el ministro.