La planta de VTV revisa entre 30 y 40 mil vehículos por año de Tandil y la zona

Con un importante parque automotor, la Verificación Técnica Vehicular (VTV) revisa entre 30 y 40 mil vehículos al año de Tandil y la zona en el Parque Industrial.

Como punto central para realizar esta inspección, la planta hace 18 años que está en funcionamiento y en ese tiempo aumentó la cantidad de vehículos que pasan por allí. Hoy día los conductores tomaron algo más de conciencia respecto a la importancia de la verificación.

Sergio Rodríguez es jefe de zona de Applus Iteuve Argentina, la empresa que realiza la VTV en la Provincia, dialogó con El Eco de Tandil y destacó no sólo la necesidad de verificar todos los vehículos sino que se agudice el control en las calles para que los autos conserven su estado.

Son cerca de 200 los vehículo que pasan por día en la planta del Parque Industrial; lo que al año hacen un total de entre 30 y 40 mil de Tandil y la zona del sur, que tiene un importante caudal de vehículos. De esa estadística, aproximadamente el 70 por ciento de los vehículos salen bien de la verificación y el 30 restante sale mal y tiene 60 días para arreglarlo, lo cual no quiere decir que pueda circular.

Frente a eso existen tres posibilidades: la primera es que salga apto; la segunda condicional, por lo cual salió mal y debe modificar algo pero puede circular por 60 días; o el rechazado que tiene esos mismos días para volver sin costo pero no puede circular.

Por otro lado, las fallas más comunes que se observan son fundamentalmente los frenos, las luces y tren delantero, y luego lo que respecta a cinturones de seguridad. “Si la gente tiene cuidado por lo menos con la parte que puede ver personalmente como es el caso de las luces o los cinturones, las puede revisar antes de venir. Igualmente deberíamos hacerlo para circular y no sólo para verificarlo”, indicó Rodríguez.

Agregó que hay que desmitificar que si el auto es viejo es difícil que apruebe ya que eso no es real. La realidad es que la verificación establece valores mínimos para circular que generalmente el auto nuevo ya lo tiene, salvo excepciones, y el auto viejo si se lo mantiene correctamente tampoco debería tenerla. No obstante puntualizó que algunas camionetas viejas pueden tener problemas de contaminación que puede ser complicado, pero no está relacionado directamente con que sean vehículos viejos.

 

El trámite

 

Hoy trabajan con turnos que se puede tomar vía internet en la página www.infovtv.com.ar o al 0800-3453-888 donde una telefonista le da el turno al cliente; teniendo en cuenta que de ambas formas los turnos salen del mismo sistema con lo cual ninguno es más rápido que otro. Al día de hoy quienes quieran obtener un turno, hay horarios disponibles para el 12 de marzo.

Una vez que se saca el turno, si el vehículo ya fue verificado en la planta debe presentar la tarjeta verde, documento del conductor y si tiene gas la tarjeta correspondiente. En el caso que sea la primera vez, además de todo lo mencionado es necesario el título de propiedad porque se registra en la planta y el título es el único lugar donde figura la fecha de inscripción inicial. Allí se verifican autos particulares, profesionales, camiones, colectivos, motos; todo lo que está patentado en la provincia de Buenos Aires y que sea de la zona que nos corresponde sino en la planta de su región.

Para poder circular se va a entregar una oblea que se colocará en el vidrio del auto y un informe, ahora hay que circular con ambas cosas. De la fecha de vencimiento que figura en el informe, tiene que acercarse un mes antes a verificar. Por otro lado el informe tiene el número de oblea que está pegada en el parabrisas y las observaciones que quedaron, en el caso que haya alguna, para hacerlas.

Algunas observaciones aunque hayan pasado la verificación hay que hacerlas igual porque no están permitidos para circular en la vía pública, tal es el caso de los vidrios polarizados. Eso se advierte en las observaciones porque no es un impedimento para desaprobar la verificación, ya que se ajustan a un manual que les entrega la Provincia.

 

Conciencia y control

 

Rodríguez indicó que a lo largo de los años la comunidad tomo un poco más de conciencia respecto a la importancia de la verificación, aunque algunas personas si no los traen obligados no van a venir; otros ya se hicieron clientes y concurren anualmente de forma regular.

Incluso si el auto está verificado, se pueden acercar a la planta durante el año sin costo y lo revisan en caso de que tengan una duda. Otra opción es concurrir un mes antes del momento que debe ir a verificar, se acercan para revisarlo y ver qué le falta, por supuesto que sacando un turno. “Pero eso va en la conciencia o la forma de ser de cada uno y algunas personas utilizan ese servicio”, agregó.

También es real que muchos llegan con la verificación ya vencida, sale mal y cuando les informan que no pueden circular por determinado motivo no entienden por qué. No obstante el jefe de zonas resaltó que la conducta en general de las personas es buena y no han tenido mayores inconvenientes; aunque muchas veces les molesta tener que volver por alguna observación que se le hizo.

“Pero la realidad es que para eso estamos verificando el vehículo. Acá se presta un servicio que asegura que el vehículo esté en buenas condiciones dentro de los requisitos mínimos que se esperan, no venimos a pegar sólo una oblea”, manifestó.

Ya desde un ámbito personal, Rodríguez advirtió que algunas veces cuando se ven vehículos fuera de los límites establecidos, “te da bronca” pero no puede salirse fuera del trabajo que tiene que hacer. “Uno está sensible a ver distintas cosas” y como todo ciudadano se pregunta por qué no lo controlan, pero en la planta esa no es la finalidad sino que sólo verifican.

Hay que reconocer que si las condiciones del vehículo se modifican de la planta para afuera una vez que se le entregó la oblea y la policía detiene ese vehículo y lo corrobora, deberían quitársela porque eso está legislado. “Por supuesto que el policía no puede hacer cosas que técnicamente no tiene maquinarias como es el caso de los frenos; pero si ve algo que no se mantuvo con las condiciones de verificación se la debe anular y hacerle la multa. Tal es el caso de las luces o que algunos piden prestados neumáticos para verificar y luego los cambian, entre otras cosas”, detalló.

 

Miedo a la fosa

 

Uno de los miedos más comunes que manifestó Rodríguez es el miedo a caerse a la fosa o que el automóvil lo haga. El sistema de esta planta es que el vehículo lo maneja el usuario, por lo que los empleados no deben tocarlos; salvo casos puntuales que por pedido expreso del usuario como personas que tienen pánico o embarazadas se hace pero no es lo que se acostumbra.

Sin embargo advirtió que cuando están por llegar a la fosa, les da miedo y no quieren circular pero se los guía para que lleguen correctamente. “En 18 años, casi no hubo caídas a la fosa, pero si sucede es porque se abatatan y cuando lo estás guiando y le dijiste a la derecha y va para el otro lado y cae una rueda. Pero son muy pocos casos y la realidad es que también se tiene mucho cuidado porque también corre riesgo el personal que está trabajando”, concluyó Sergio Rodríguez. 

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