PJ: planeta ultra-K licuó un acto montado para bendecir a Scioli

PJ: planeta ultra-K licuó un acto montado para bendecir a Scioli

En la papeleta de buena fe figuraban, cinco días atrás, un delegado premium de Máximo Kirchner, el jefe de Gabinete cristinista y, mínimo, cuatro candidatos presidenciales K. Fue -hasta ahí- el mérito de Francisco "Paco" Pérez, gobernador de Mendoza, que convirtió su asunción como jefe del PJ local en un episodio nacional que con las horas adquirió otra característica y terminó ayer menguado por una ristra de ausencias.

Del staff inicial, al final se cayeron Jorge Capitanich, los candidatos Sergio Urribarri y Julián Domínguez, y el neocamporista Eduardo "Wado" de Pedro, que, además, modificó su destino: anuló su pasaje a Mendoza para volar rumbo a Río Gallegos, donde compartió un acto con Florencio Randazzo, el ministro del Interior y Transporte que se recorta como la espada más sólida contra la candidatura única de Daniel Scioli.

Góndola K

El protagonismo del gobernador bonaerense -la mejor oferta numérica de la góndola K- en el show mendocino fue lo que, con el paso de las horas, terminó por restarle densidad y concurrencia. Hubo un motivo subrepticio para quePérez, que deslizó su preferencia por Scioli, organice esta juntada casi al paladar del bonaerense: el último show mendocino, armado por Gestar, fue encabezado por Randazzo, que aprovechó la tarima para castigar a Scioli, lo que incomodó a los demás oradores.

Así y todo, el objetivo central de Pérez era juntar a la mayor cantidad de gobernadores, postulantes y referentes. Por un momento se planeó una reunión del Consejo Nacional del PJ que, la semana pasada, suspendió Eduardo Fellner, el jujeño que preside el partido. Fue la excusa oportuna para que empiecen a anularse las reservas.

Al caer el día, lo que se planeó como un acto central y nacional del PJ por el Día del Militante asomó con menos potencia que la prevista y sin ningún referente ultra-K en el escenario. La foto puede, igual, leerse como una postal filosciolista porque estuvieron, además de Pérez y Scioli, el jujeño Fellner, el formoseño Gildo Insfrán, el chubutense Martín Buzzi, el misionero Maurice Closs y, quizá lo más importante en el ajedrez del PJ, el salteño Juan Manuel Urtubey. De los funcionarios cristinistas sólo estuvo Diego Bossio, titular de ANSES y anotado en la carrera por la gobernación bonaerense.

En el sur, como contracara, Randazzo encabezó un acto con militantes en Río Gallegos, donde posó con De Pedro, como un tercerizado respaldo de Máximo K. Más temprano compartió una actividad de gestión con Alicia Kirchner, la ministra de Desarrollo Social que tuvo, claro, un componente peronista: fue para poner en marcha el tren sanitario Eva Perón, que partió, ayer, rumbo a Salta.

Usina cristinista

En Gobierno leen esos movimientos, al igual que el faltazo de Capitanich, como una señal partida directamente del clan Kirchner. "No quiere decir que Randazzo vaya a ser el candidato K, pero es un mensaje para los que dicen que ya está todo definido a favor de Scioli", explicó un operador cristinista. "Se equivocan los dos: Scioli porque se apura y quiere dar por sentado todo, y Randazzo porque se pone agresivo", leyó un armador JP.

Lo que se emite con claridad de Olivos es apostar a la PASO como instrumento donde se definan las candidaturas y el kirchnerismo pueda mostrar su vitalidad y movilización. Lo dijo Juliana Di Tullio el fin de semana al poner las primarias como ring inevitable de 2015.

El resultado último fue una foto más acotada, sin el esperado despliegue de caciques, y una saga inagotable de actos y microactos de los demás candidatos K para justificar su faltazo a la cumbre en Mendoza. Julián Domínguez saturó su lunes militante entre la apertura de un local del grupo San Martín, su think tank campañista, Agustín Rossi visitó el conurbano y Sergio Urribarri volteó la agenda que tenía programada en Mendoza -incluso la firma de un convenio turístico con Pérez- para subirse a un show de Unidos y Organizados junto con Andrés "Cuervo" Larroque de La Cámpora; Edgardo Depetri y Andrés La Blunda, entre otros dirigentes K.

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