Fue ayer en 45, 4 y 5. La víctima fue un jubilado de 82 años. Por teléfono le dijeron que tenían raptado al hijo. Hay una pareja gitana detenida
En el hecho participaron al menos cuatro delincuentes y dos fueron detenidos: un joven de 27 años y una mujer de 31, ambos gitanos. En tanto los que se escabulleron se llevaron el suculento botín.
Todo empezó cerca de las 4.30 cuando la víctima, Douglas Wilfredo Sufriategui estaba durmiendo en su departamento del piso 11 del edificio ubicado en 45 entre 4 y 5, numeral 473. El anciano escuchó el teléfono y atendió.
Según confirmó un vocero policial, el interlocutor le dijo a Sufriategui que tenían secuestrado a su hijo y que debía juntar dinero y joyas en bolsas y dejarlas en la vereda, caso contrario, matarían al presunto capturado.
El jubilado, asustado y desorientado, colocó sus ahorros y alhajas en dos envoltorios, y con dudas llamó al servicio de emergencias 911.
Instantes después el hombre bajó a la planta baja y se asomó a la vereda. Un jefe policial indicó que ya había llegado al lugar un patrullero de la comisaría Primera, pero la reacción del jubilado fue la de echar a los efectivos.
“La actitud ambigua de Douglas hizo que los uniformados dieran la vuelta manzana, estacionaran en la esquina de 4 y 45 y apagaron las luces”, precisó uno de los pesquisas.
Enseguida aparecieron en escena dos vehículos: un Fiat Adventure verde y un Fiat Punto beige, con dos ocupantes cada uno.
Los policías vieron como el jubilado dejó las dos bolsas cerca de un canasto de basura y que los cuatro sujetos se alzaron con los envoltorios en una rápida maniobra.
Persecución y pareja presa
Los dos autos con los delincuentes iniciaron la marcha y el móvil policial quiso interceptarlos. “Lo esquivaron y aceleraron”, explicó una fuente de la fuerza.
El Fiat Punto con dos de los ladrones fue perdido de vista, pero el patrullero encerró a la camioneta Fiat Adventure en 4 y 43. En el interior estaban Jhonatán Tan (27) y Andrea Cristón (31). Ella, oriunda del barrio porteño del Bajo Flores y vestida con ropa característica gitana, tenía un reloj marca Rólex que según un jefe policial es una joya robada a jubilados en Tolosa hace tres días. También se incautó un teléfono Nextel. El operativo cerrojo para dar con el resto de la banda no dio resultados positivos.
Una banda millonaria
La detención de la pareja estuvo a cargo de personal de la comisaría Primera, al mando de Marcelo Cifuentes con la colaboración directa del Jefe de la Distrital, Darío Camerini.
Luego se incorporó en la investigación la DDI La Plata y se supo que Jhonatán Tan estaba bajo sospecha de comandar una banda de seis integrantes dedicada a secuestros virtuales. “El Nextel que le secuestraron estaba intervenido”, explicó uno de los detectives.
Según uno de los investigadores, desde mediados de septiembre pasado un grupo de delincuentes cometió al menos 20 raptos virtuales en La Plata, con un promedio de unos 30 mil pesos por cada atraco. Y en algunas madrugadas se denunciaron hasta tres hechos de esas características.
El modus operandi que atravesó a todos los hechos tenía estas características: las víctimas fueron ancianas, actuaban de madrugada, los recolectores de los botines se movilizaban en autos costosos y usaban para comunicarse varios teléfonos celulares.
Los detectives ya tenían grabadas varias escuchas telefónicas entre los miembros de la banda.
“Se pudo determinar cómo se orquestaban las maniobras delictivas y se reunían para cometer los hechos, estableciéndose por las escuchas cómo repartían las ganancias, y organizaban la compra de vehículos de alta gama, e incluso realizaban viajes de mini vacaciones a la costa y se permitían un pasar muy holgado”, detalló uno de los pesquisas.
Ahora se busca intensamente al resto de los delincuentes.
Investiga la UFI nº 2 del fiscal Tomás Morán, quien caratuló el caso como averiguación de ilícito en el marco de una presunta extorsión.
La relación con el golpe de hace 4 días en Tolosa
El martes pasado a la madrugada un matrimonio fue estafado por medio de un "secuestro virtual" en Tolosa y el hombre asaltado se descompensó y debió ser asistido de urgencia.
El caso sucedió cerca de las 6 en 119 entre 531 y 532 cuando un sujeto le comunicó a los damnificados por teléfono que su hijo estaba secuestrado y que si querían volver a verlo sano y a salvo, debían entregar todo el dinero en efectivo que tuvieran en su casa, además de objetos de valor.
Tras la entrega de alrededor de 5 mil dólares y 10 mil pesos, los estafadores no volvieron a llamar, por lo que el matrimonio se contactó con el hijo y descubrieron que estaba bien.
El hombre estafado, enfermo cardiaco, tuvo una crisis pero por suerte se recuperó enseguida.
Ayer, un reloj robado a ellos fue encontrado en la muñeca de la detenida en 3 y 43.
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