Los trabajadores del hospital de alta complejidad exigen un monto que asciende a 3456 millones de pesos. Según la ley, ese importe debe ser financiado, en partes iguales, por los gobiernos de la Ciudad y la Nación. Sin embargo, el proyecto de ejercicio financiero presentado esta semana en la Legislatura porteña se aleja bastante de lo que esperan los médicos.

Los $ 1728 millones que debería asignar la administración porteña al Garrahan (la mitad de ese total de 3456 millones) quedarían en $ 1380 millones según la propuesta del gobierno de la ciudad, que está sometida a debate. Es decir, $ 348 millones menos de lo pretendido por el hospital.

"Sólo en el hospital Garrahan se concentra el 60% de las internaciones pediátricas que ocurren en la ciudad de Buenos Aires", manifestó un grupo de trabajadores a través de un comunicado. "Ese presupuesto es necesario por la magnitud y complejidad de las prestaciones que se desarrollan en nuestra institución", sostuvieron.

Así intentan rebatir la postura del gobierno porteño que indicó que se llegó a esa cifra teniendo en cuenta los aumentos que recibieron los otros dos hospitales pediátricos porteños, el Elizalde y el Gutiérrez.

El informe del presupuesto fue presentado por Martín Mura, subsecretario de Gestión y Administración Financiera del Ministerio de Hacienda. Sobre la situación del Garrahan, señaló que mantuvo reuniones con directivos del hospital para "garantizar la diferencia que había en el pago de salarios", lo que fue luego desmentido por el coordinador de terapia intensiva de la institución, Aldo Haimovich.

Fuentes del Ministerio de Salud local indicaron que el aporte presupuestario no es el definitivo. "Como todos los años es un debate que se da en la Legislatura y en el que los diputados de todos los partidos llegan a un acuerdo. Ese consenso todavía no se alcanzó porque aún no se debatió la ley", explicaron.

Según la agenda prevista, el presupuesto para 2016, que estipula un gasto total de 122.000 millones de pesos para la Capital, sería debatido el jueves próximo.

En la penúltima sesión ordinaria, los diputados aprobaron varias iniciativas, entre ellas, una nueva prórroga para la mudanza del Mercado de Liniers que funciona en Mataderos. Una ley de 2001, de la ciudad, dispone que el mercado porteño se debe mudar a San Vicente, provincia de Buenos Aires. Sin embargo, a través de acuerdos políticos entre el directorio de la institución y el gobierno porteño, ese traslado se posterga año tras año.

El nuevo plazo vence el 31 de diciembre de 2017. "El objetivo del proyecto es proponer otra prórroga, dado que se acerca la fecha de vencimiento y existe la necesidad de contar con un nuevo plazo. En la actualidad no finalizaron las obras del predio en San Vicente donde se mudaría el mercado, y el cierre en Liniers generaría un perjuicio grave y operativo para la comercialización del ganado", indica el proyecto.

El de Buenos Aires es el mercado de hacienda más grande del mundo: comercializa cerca de 140.000 cabezas por mes.