Piden desalojar a vendedores ambulantes de plaza céntrica

Piden desalojar a vendedores ambulantes de plaza céntrica

Por el avance de las obras del centro comercial, el Municipio de Villa Mercedes quiere ubicarlos en Balcarce y Pescadores.

Son nueve puesteros que llegan todas las mañanas alrededor de las 9, bajan alambres y maderas y arman los stands sobre una de las veredas de la plaza del Sesquicentenario, por calle Balcarce desde Rivadavia a Urquiza. Algunos llevan más de veinte años en la venta ambulante y anteriormente han ocupado diferentes sectores del centro local. Sin embargo, la normativa de la ciudad prohíbe la comercialización callejera en el microcentro y por eso, ayer, llegaron los efectivos de la Unidad de Control e Inspección Municipal (UCIM) y los multaron. Además de la infracción, el Municipio quiere que desalojen el lugar para comenzar con las reformas previstas en la obra del Centro Comercial a Cielo Abierto, que hoy están demoradas y que deben finalizar el 13 de junio próximo.

 

 La jefa del área, Teresita Ludueña, contó que el conflicto está vigente desde 2013 y aún no pueden resolverlo. "Entablamos relaciones ese año a raíz de una queja de los frentistas pero no pasó nada. En enero noté que venía la realización del centro comercial y las máquinas iban a arrancar con las reformas en Balcarce. Les hablé y anticipé qué iba a pasar, que se preparan y buscaran otro lugar, que el Municipio también lo haría", describió.

 

Según comentó la funcionaria, el viernes pasado se reunieron con los nueve propietarios y la encargada del programa Planeamiento Urbano, Franca Turco, donde determinaron que desde el 16 mudarían sus puestos a Belgrano, entre Fuerte Constitucional y Pescadores, detrás del edificio de Obras Sanitarias (OSM), para que la empresa que ejecuta las reformas en el centro empezara a trabajar en la plaza. "Quedamos que irían momentáneamente, pero hoy cambiaron de opinión; se instalaron ocho de ellos, así que labramos las  infracciones por ocupación de la vía pública. En esta gestión nunca tuvieron el permiso para comercializar allí", sostuvo Ludueña.

 

Los puesteros alegan que en los espacios propuestos por el Municipio no hay circulación de gente y tendrán menos ventas. "Hicimos de esta plaza algo divino, un paseo de compras pero ahora nos quieren mandar a otro lugar, es un manoseo que nos sacan y nos llevan de acá para allá. No nos dan certificaciones y eso pedimos, algo escrito porque ésta es nuestra fuente de trabajo, de nuestros hijos y nietos", se quejó Cristina Olguín, una de las vendedoras.

 

Otro de los comerciantes, Joel Castañeda, agregó que "queremos que nos den un lugar digno para poder trabajar. Estamos dispuestos a conciliar así nos vamos pacíficamente al sitio que nos toque, pero necesitamos una certificación por escrito para trabajar tranquilos, porque en cada periodo de gobierno nos corren".

 

El Municipio evalúa la idea de instalarlos en el Paseo del Tanque,  un proyecto en el que refaccionarán el edificio de OSM, y que el intendente Mario Merlo anunció en la última apertura de sesiones legislativas. “Se ofreció acondicionarles el galpón, en especial para que estén cómodos, que tengan agua corriente y un baño, pero eso va a demorar, es para un futuro", aclaró Ludueña.

 

Aún así, los puesteros no levantaron sus stands, continuaron con sus tareas y quedaron expuestos a nuevas sanciones. "Queremos defender nuestra fuente de trabajo.  El 27 de marzo tenemos audiencia con el intendente pero, mientras, nos piden que nos vayamos de acá sin nada escrito y después, ¿cómo reclamamos nuestro trabajo?", se preocupó Ricardo Sánchez. Ludueña aclaró que "seguimos conversando para lograr una solución, aunque el plazo que teníamos venció ayer, nadie quiere actuar por la fuerza".

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