Murió, sí, Osvaldo Arabarco. El hombre que inmortalizó a Neuquén en la letra de su himno, junto a otro grande que nos mira desde el pasado, Marcelo Berbel.

Arabarco tenía 69 años. Había nacido en Neuquén el 11 de septiembre de 1945. Trajinó esta tierra oficiando de pionero en la comunicación. Fue de las primeras figuras del canal 7, la TV abierta primera de la provincia. Fue parte de aquella LU5 primigenia, esa radio que marcó a fuego las mañanas informativas y musicales del aire neuquino.

Se había recibido en el Instituto Superior de Enseñanza radiofónica. También había obtenido  la licenciatura en Ciencias de la Comunicación en la Universidad Nacional de Buenos Aires.

Hace semanas que su salud se había deteriorado, debido a una crónica afección cardíaca. Parecía, en un momento, que lograría superar el trance. Pero la muerte de lo llevó. Nos dejó su recuerdo, que esperamos mantener vivo.