Las empresas Edenor y Edesur arreglaron con el gobierno de Mauricio Macri que el congelamiento de tarifas que dispuso el oficialismo para “pasar” las elecciones sea actualizado en la próxima administración. Es decir, si se repiten los resultados de las PASO, que se pague durante la gestión de Alberto Fernández. Según informaron fuentes de Edesur a El Destape, “el aumento ronda el 8% y lo abonarán los usuarios a partir de enero de 2020 en siete cuotas consecutivas”.

“Queda congelado el aumento de tarifas de agosto hasta enero del próximo año”, indicaron fuentes de Edesur ante la consulta de este medio. El viernes pasado, tanto Edesur como Edenor informaron a la Comisión Nacional de Valores (CNV) que habían acordado con el Gobierno esta renegociación.

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Según comunicaron las firmas a la CNV como “hecho relevante”, suscribieron el mismo viernes “con la Secretaría de Gobierno de Energía un Acuerdo en virtud del cual se dispone mantener durante el período de cinco meses iniciado el 1° de agosto de 2019, el cuadro tarifario vigente previo al comienzo de dicho período, para todas las categorías tarifarias”.

 

 

 

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Tanto Edesur como Edenor explicaron a la CNV que por dicho acuerdo “la actualización del Costo propio de Distribución (CPD) correspondiente al 1° de agosto de 2019 se aplicará hasta un máximo equivalente al monto percibido por esta concesionaria durante el semestre inmediato anterior en concepto de recupero del diferimiento del semestre previo, y la diferencia que resulte será recuperada a partir de 2020 en siete cuotas mensuales y consecutivas, ajustadas por CPD”. 

De esta forma, Macri pasó a Alberto Fernández el descongelamiento tarifario que dispuso para evitar que la medida impactará de modo negativo en el electorado. Es que el aumento en las tarifas debía aplicarse 10 días antes de las PASO.

 

 

 

Entre las que más ganaron

Las empresas de energía están en el pelotón de las máximas beneficiarias de la era Macri, tal como publicaron Ari Lijalad y Ezequiel Orlando en El Destape. Edesur, propiedad de ENEL, y cuyo accionista minoritario es el hermano de la vida de Macri, Nicolás Caputo, por ejemplo, pasó de 4.579 millones de ganancias en 2016 a 15.162 millones en 2017 y una drástica reducción en 2018, donde informó apenas 3.087 millones. En lo que va de 2019 parece que se recuperó, con ganancias por 8.586 millones. Por su parte, Edenor, cuya controlante es Pampa Energía, obtuvo ganancias durante el macrismo por $7.299 millones. Solo en el primer semestre de este año llevan acumulado 1.644 millones.