El policía Claudio Salas, procesado con prisión preventiva por el crimen de Braian Hernández, sería imputado por homicidio calificado en los próximos y luego sometido a juicio oral. Es que fueron negativos los resultados de una pericia dactilar realizada a un revólver que habría sido hallado en el interior del auto que ocupaba el adolescente de 14 años cuando recibió el disparo del efectivo. Esto prácticamente demolió la estrategia de los defensores que esforzadamente pugnan por suavizar la situación procesal en la que se encuentra.

Según fuentes judiciales consultadas, los terminantes resultados de una pericia sobre el arma de fuego secuestrada, que fuera ordenada por el titular del juzgado de Instrucción Cuatro Cristian Piana y que finalizaron el martes pasado, confirmaron que no se encontró huella dactilar alguna en la empuñadura cubierta con cinta aisladora negra y tampoco en el todo el cuerpo del revólver.

El informe, que se encuentra en poder del juez, prácticamente habría concluido con las investigaciones del caso y ahora sólo resta dar cumplimiento a algunas declaraciones testimoniales propuestas el Ministerio Fiscal y los abogados querellantes, entre otras medidas, para finalmente enviar la causa a juicio, agregaron las fuentes.

Trascendió además que, habiendo terminado el minucioso estudio con los concluyentes resultados, Salas se encamina a un juicio oral y público, que será ventilado en una de las Cámaras Criminales de esta ciudad y la calificación inicial del delito no sería otra que homicidio calificado, que prevé una condena de prisión perpetua.

Declaraciones sorprendentes

Salas, al ser interrogado por el juez, declaró que vio un arma de fuego dentro del auto que ocupaban Braian y sus amigos. Agregó que advirtió un fogonazo por lo que creyó que los jóvenes estaban disparando contra una compañera.

El juez Marcelo Muñoz, responsable de la investigación inicial del delito, consideró que los elementos de prueba reunidos hasta ese momento no eran suficientes para mantener la detención del oficial y dispuso su excarcelación por falta de méritos.

La resolución, que no lo eximía de su presunta responsabilidad penal, fue cuestionada severamente por la Fiscalía y la querella, quienes presentaron sendos recursos de apelación.

La Cámara de Apelaciones, luego de examinar los planteos, resolvió revocar el dictamen dispuesto en favor el policía y calificó su conducta penal como autor de un homicidio calificado.

Los jueces de Cámara Daniel Varessio, Richard Trincheri y Alfredo Elosu Larumbe dictaminaron el procesamiento con prisión preventiva de Salas, quien permanece encerrado en una celda de la U11 de esta ciudad.

Disparo mortal

El homicidio del adolescente se produjo durante la madrugada del 19 de diciembre pasado en el barrio Cuenca XV, en la esquina de las calles Casimiro Gómez y Gervasoni.

La víctima y otros jóvenes menores de edad se movilizaban en un Renault Fuego y fueron interceptados por un patrullero de la Comisaría 18. Los policías habrían intentado identificarlos, por lo que los adolescentes abandonaron el lugar y fueron perseguidos por el móvil. Todo terminó con el disparo que Salas efectuó al auto y que impactó en la nuca de Braian Hernández.