CHOELE CHOEL (AVM).- Mientras la zona del Valle Medio se apresta a vivir cuatro jornadas de fiesta en Lamarque, para rendirle tributo a la producción tomatera, la actividad atraviesa un duro momento. "Podemos caratular la temporada como regular tirando a mala", sostuvo el ingeniero agrícola, Nicolás Noale, analizando la actual temporada de cosecha de tomate en el Valle Medio. 

Viento, granizo y lluvias afectaron los plantíos llegando a generar pérdidas calculadas en unos 15 millones de kilos.

Por otra parte, la empresa Canale bajó las persianas de su planta de molienda en Lamarque, dejando sin trabajo a alrededor de 70 personas.

Sí continúan en actividad La Campagnola y Molinos Bruning pero van a moler muchas menos toneladas que las planeadas a principios de la campaña 2016.

Noale explicó que "nos afectó bastante el viento que afectó la floración, y después el granizo causó daños a muchos productores. Luego la lluvia perjudicó en época de cosecha. Fue así que de los 45 millones de kilos que se tenían pensado moler se harán 30 ó 35 dado que se perdieron entre 10 y 15 millones de kilos".

En la zona de Valle Medio hay unas 900 hectáreas en producción de tomate para industria. En la temporada de cosecha emplea alrededor de 1.000 personas, entre las que trabajan en el campo y las que están dentro de las plantas de producción. Hay 19 productores que tienen relación directa con la fábrica más grande que opera en el área: La Campagnola.

En los últimos años, gracias a la aplicación de tecnología en los campos, se llegó a obtener rindes de hasta 80.000 kilos por hectárea, cuando antes apenas rondaban los 40.000 kilos. Pero este año, todo cambió. Para Noale, la situación actual genera pérdida de mano de obra. "Porque, por ejemplo, el productor que tenía pensado contratar 10 personas para la cosecha ahora a lo mejor le alcanza con cinco. Pero también genera que personas que venían del norte a cosechar no les rinda el trabajo por la merma en la cantidad de kilos por hectárea. Y de ese modo se terminan yendo a cosechar otros productos como cebolla", agregó el profesional que se desempeña en el área de producción de La Campagnola.

Por último, dijo que "no sólo se perdió producción, sino que la calidad desmejoró bastante con respecto al año pasado, con más frutos podridos, dañados por el granizo, y con aumento del porcentaje de verde".