En ambos casos, estas obras generan trabajo y traen progreso en diversos sectores de la ciudad.

Ahora bien, quien pudo hilar fino y mirar bien se puede haber dado cuenta de una diferencia que marca la compleja situación municipal y como a veces los trabajadores municipales  hacen un esfuerzo mayor para  cumplir con los vecinos.

Cordones en calle 77 y 42

Como se ilustra en esta nota, se ve como se realizó el cordón en la avenida 10 con una máquina moderna que simplificó el trabajo de construcción de los cordones del bulevar y que lo hizo más rápido. Mientras que en la calle 77 se hizo a la manera municipal con moldes de hierro, herramientas, camiones volcadores y mucha y buena mano de obra municipal.

Esto no sería nada dado que marcaría como trabaja una empresa privada con equipos más modernos y cómo el estado municipal, donde todo es más precario y se cuenta siempre con el valor de los empleados, que no sólo conocen el oficio sino que también se adaptan a todo.

Pero hay algo más y es lo preocupante, dado que el 19 de septiembre de 2016 el boletín municipal informaba la compra de una cordonera por parte de la municipalidad:

El municipio adquirió una máquina cordonera

La Municipalidad de Necochea adquirió una máquina cordonera para ejecutar tareas en las calles de tierra del Distrito con mayor celeridad, para lo que el intendente municipal, Dr. Facundo López, firmó el decreto de adjudicación de este equipamiento valuado en 381.250 pesos.

Cabe destacar que en el concurso de precios, en el que había tres posibilidades, se adquirió la marca Impex Argentina S.A.

La máquina construye perfiles continuos de hormigón con un mínimo plantel de personal a un ritmo  entre 90 y 120 mt./hora y está equipada con motor a explosión de 13,5 HP.

A raíz de esto la pregunta que nos viene a la cabeza es ¿qué pasó con la cordonera? Porque las obras en Necochea y Quequén se siguen llevando adelante como siempre, con el esfuerzo y la sapiencia de los trabajadores municipales.