Mediante un tweet, publicado por Pablo Retamoza -@RetamozaFPV– el ex concejal observó una modificación en su cartón de estacionamiento: el lugar donde se ubica el valor original estaba tachado y el mismo precio estaba marcado con un sello en un lugar que no corresponde. Esto llamó la atención de Retamoza y preguntó: ¿es legal que te vendan estas #TarjetasEstacionamiento? y la calificó como #UnPocoTrucho.

Es legal q te vendan estas #TarjetasEstacionamiento? #UnPocoTrucho pic.twitter.com/AhA3l5mbVD

— Pablo Retamoza (@RetamozaFPV) 7 de marzo de 2017

Sumado a esto, en los últimos meses surgieron otras complicaciones referidas al estacionamiento en la ciudad. Por ejemplo: el propietario de un auto decidió dejarle un mensaje a los inspectores de tránsito. El mismo decía: “Estimado sr/a. de tránsito: por favor no me multe, ¡no tengo plata para pagar estacionamiento medido! y menos que menos a fin de mes”. A cambio, propuso: “si quiere, le puedo ofrecer un café o unos altos mates bien bien amargos”.

 

Otros de los problemas surgen a la hora de conseguir un lugar para estacionar, tarea para nada sencilla en Mar del Plata. En ese sentido, el conductor de una Renault Sandero no dudó y dejó el auto en la vereda. El hecho ocurrió la semana pasada en Colón y Tucumán, donde la indignación de vecinos y peatones se hizo notar.

 

Tal es así, para que no surjan más sorpresas, vale aclarar que por una disposición del municipio, a partir de este jueves 16 de marzo y hasta el 15 de diciembre, el estacionamiento medido tiene nuevo horario: de lunes a sábados rige de 8 a 20 mientras que los domingos, feriados y asueto será libreestacionar en las calles de la ciudad. Además, recordar que el estacionamiento medido abarca la zona de 25 de Mayo hasta Colón y de Buenos Aires hasta 20 de Septiembre.

¿Esta es la verdadera política del gobierno de Carlos Fernando Arroyo en cuestiones de tránsito, en la que hasta el propio jefe comunal realizó inspecciones de alcoholemia?

Al parecer, algunas cuestiones quedaron libradas al azar y ya se perdió la imagen de la mano dura de Arroyo en el control vehicular, cuando ocupaba el cargo de director general de Tránsito. En ese momento, 25 años atrás, se lo podía observar al ex director de escuela proceder con todo el rigor de la ley.