El Gobierno municipal se encuentra en una encrucijada en el marco de la relación con  los sindicatos, que este jueves rechazaron la oferta de incremento salarial del seis por ciento distribuido en dos cuotas y anunciaron un paro por 48 horas, al tiempo que ratificaron su pretensión del 17 por ciento de aumento.

El pago del porcentaje ofrecido implica para las arcas municipales una erogación de alrededor de 3 millones de pesos, incluyendo medio aguinaldo y cargas sociales, lo que significa un monto muy importante para las alicaídas finanzas públicas locales, además de un incremento ostensible de la masa salarial en el presupuesto.

Si se tiene en cuenta que lo que piden los sindicatos es casi el triple, hay que calcular que si el Ejecutivo accediera a esa pretensión debería contar con alrededor de 9 millone de pesos más y dejaría una pesada carga al Gobierno que asuma el 10 de diciembre próximo.

La propuesta del Ejecutivo, sumado al 21 por ciento obtenido para el primer semestre, implicaba un incremento total del orden del 26 por ciento directo anual y del 28,52 acumulado. Sin embargo, para los sindicatos municipales es poco y el paro anunciado es el primer paso de medidas de fuerza tendientes a obtener un aumento más significativo.