Panella, quien el año pasado perdió “por goleada” en la interna de la UCR local en manos de Marcelo Uriarte y Marcelo Viñes, busca nuevamente posicionarse políticamente para dar pelea en la contienda electoral que se avecina.

El ex diputado radical, ha logrado reinventarse y cuenta con el apoyo del operador político del “macrismo” en la Provincia, Marcelo Daletto, y el ex concejal del PRO local, Julio Irurueta, quienes ya no esconden su interés en que Panella sea candidato a intendente.

A modo de cronología, es bueno recordar que el dirigente de la UCR bonaerense asumió su banca de diputado a través del Acuerdo Cívico y Social que conformó el radicalismo con sectores progresistas como el GEN y la Coalición Cívica en las elecciones del 2009.

En dicho momento, Panella llegó junto a Oscar Negrelli a la Cámara Baja provincial, pero a pesar de contar con el pleno respaldo del Diario El Día, no puso siquiera mantener la unidad en el radicalismo platense y rápidamente sufrió rupturas internas que debilitaron su poder territorial.

Ante ese escenario, tuvo un primer intento de ser intendente en 2011, cuando la UCR a cargo de Ricardo Alfonsín había trazado un acuerdo con el “Colorado”, Francisco de Narváez.

En dicha contienda electoral, armó una lista “pura” de radicales y terminó perdiendo en las Primarias Abiertas con el dirigente peronista Gonzalo Atanasof, quien se aprovechó de la fusión electoral para potenciar su candidatura.

Panella se las rebuscó para mantener políticamente activo pese a la derrota, y a la espera de que la suerte vuelva a estar de su lado fomentó un frustrado armado radical para vencer el poder de Alfonsín, Federico Storani y Miguel Bazze en la Provincia bajo el sello “Nuevos Aires”.

En dicho marco se cansó de criticar a las autoridades partidarias de la UCR a quienes los hacía culpables de haberles entregado el sello al millonario ex dueño de Casa Tía.

Dos años después, en 2013, intentó retener su banca como diputado a través de una boleta corta, ya que gran parte de la dirigencia provincial y nacional del radicalismo le habían dado la espalda a raíz de su manera de construir políticamente y sus desmedidos cuestionamientos.

En ese escenario, debió enfrentar a otras listas de dirigentes del “pan radicalismo”, perdiendo duramente en las PASO en manos de la dupla Juan Cocino- Diego Rovella, quienes finalmente se impusieron en las elecciones generales y lograron ingresar como diputados por La Plata.

Sin el poder de la banca legislativa, siguió incursionando en la arena política local, con la firme ambición de seguir pelando para llegar al sillón municipal de calle 12.

Fue precisamente con este dejo de interés que buscó posicionar a un candidato propio en la interna local de la UCR, pero sólo consiguió una nueva derrota electoral, cuando por amplísimo marguen se coronó la ya mencionada pareja Uriarte-Viñes.

Ya despojado de todo tipo de identidad política, no logró siquiera que lo dejaran ingresar a la Convención Radical realizada este fin de semana, pero aun así busca volver a reinventarse bajo la esperanza de poder sostener una candidatura a intendente de la mano de Mauricio Macri en la Ciudad.

Claro que para ello deberá sortear no sólo al candidato oficial del PRO, Julio Garro, sino también a una lista que sus correligionarios radicales insinúan presentar en las PASO, llevando como principal referente al Doctor del Hospital Español, Claudio Pérez Irigoyen.