El aumento en la tarifa de luz recientemente anunciado por el Gobierno produjo que los argentinos repiensen la manera de consumir energía eléctrica. Desenchufar la computadora cuando no sea necesario usarla, regular el uso de las luces y no dejar el televisor prendido de fondo son algunas de las alternativas elegidas por muchos para que el impacto de la suba no sea tan violento. Sin embargo, los más arriesgados reparan en una opción no tan frecuente: la instalación de paneles solares.

Si bien el origen de estos dispositivos se remonta a hace más de 100 años y son usados de forma masiva en países como Alemania e Italia, en Argentina no es una forma de suministro de energía tenida en cuenta por el común de las personas. No obstante, un grupo de investigadores locales concibe a los paneles solares como una forma viable de abastecerse de energía y por eso se dedica a su estudio de forma intensiva.

Veintidós personas de la Universidad Nacional de Mar del Plata –UNMDP-, de las cuales 16 son investigadores que también pertenecen al Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas –Conicet- y 6 becarios, se dedican al estudio de la generación de energía proveniente del sol motivados por el avance del calentamiento global.

“Estamos ante algo que si no tomamos medidas puede tornarse en una catástrofe mundial. Es evidente que hay una tendencia muy rápida del aumento de la temperatura”, manifestó en una entrevista con 10 Ahora Daniel Carrica, director del Laboratorio de Instrumentación y Control del Instituto de Investigaciones Científicas y Tecnológicas en Electrónica -ICYTE- una entidad que depende de la UNMDP y del CONICET a la vez.

En este sentido, el ingeniero aseguró que para frenar el avance del calentamiento global es necesario detener la combustión, causante de la generación dióxido de carbono, que es el principal motivo de que aumente la temperatura del mundo en forma desmedida. Por eso, según el ingeniero, “para poder eliminar el efecto hay que generar electricidad a través de energías renovables y no de combustión”.

A su vez, Carrica destacó que junto a su equipo llevan adelante el proyecto debido a que consideran que una persona puede instalar uno de estos dispositivos en sus casas porque “ya dejó de ser una tecnología rara o difícil de conseguir”. “Hoy en día pueden comprarse en sitios de Internet y se pueden importar fácilmente a través de proveedores“, aseguró el director del ICYTE.

Sin embargo, el profesional advirtió que, si bien en la actualidad el común de las personas concibe la instalación de los paneles solares como algo ligado al ámbito de la ingeniería o electrónica, “en pocos años se generarán empresas de instalaciones para que la gente pueda tener este sistema en sus casas”. 

Los investigadores de la Universidad de nuestra ciudad perciben el uso de este tipo de energía renovable como una salida para frenar el calentamiento global, una de las mayores amenazas que enfrenta la humanidad. Por eso, su edificio dispone de más de 10 paneles solares en sus instalaciones, que son utilizados no sólo para estudiar su funcionamiento, sino también para abastecer de energía el edificio, ubicado en Juan B. Justo y Rateriy.