Los datos se corresponden al Informe de Coyuntura del Ieric, con datos de noviembre de 2017. 

El estudio revela en primer lugar una caída del consumo de cemento, uno de los principales insumos de la construcción. "Las 4 jurisdicciones que se encuentran aún en terreno negativo son La Pampa, San Luis, Santa Cruz y Tierra del Fuego. Del lado opuesto, las provincias norteñas prevalecen: Catamarca y Tucumán son las dos que más que crecen, y en un segundo conjunto se encuentran Chaco, Salta y Santiago del Estero", precisó el informe.

De la mano de la caída en el consumo de cemento está la disminución de los puestos de trabajo formales en el sector. De acuerdo al relevamiento del Ieric, en junio de 2017 había 3.304 empleos registrados; en julio, 3.313; en agosto, 3.315; en setiembre, 3.189; en octubre, 3.155 y en noviembre, 3.040.

La variación mensual arroja un 3,7% menos de trabajadores en blanco, mientras que la comparación interanual determina un 18,5% menos de empleados registrados. 

Esta situación que atraviesa la construcción, en parte, se explica por la ausencia de obras nacionales en la provincia y los pocos recursos con que cuenta el gobierno provincial para sostener un nivel mínimo de obra pública.

El gobernador Carlos Verna ha dicho públicamente que en La Pampa la administración nacional no ha empezado ninguna obra desde que él está al frente del gobierno.

"Hacíamos 1.200 casas por año y ahora vamos a bajar a 63. El bajo cupo es porque, según el criterio de Nación, tenemos una gran cantidad de viviendas realizadas en los últimos 30 años. Eso significa que va a haber menos expectativa para los inscriptos y va a haber menos trabajo. Y no es que vaya a haber otras obras que reemplacen la falta de casas. No es así. En La Pampa, la administración nacional no ha empezado ninguna obra desde que somos gobierno", afirmó el mandatario durante una reciente entrega de viviendas en Alpachiri.