El primer parque solar de Mendoza inició su etapa de construcción, en la lateral este del Parque de Servicios e Industrias de Palmira (PASIP), a la vera de la ruta 7. Allí, con una inversión de U$S2 millones, el Gobierno provincial concreta uno de los proyectos que fueron adjudicados en la Ronda 1.5 de la licitación Renovar y que se calcula que estará listo para mediados de enero de 2019. Esta obra cuenta con la participación conjunta de Emesa (Empresa Provincial de Energía) y la Cooperativa Eléctrica de Godoy Cruz.

En este parque se instalarán 4.000 paneles fotovoltaicos y se prevé que generará 1,32MW de potencia instalada y conectarse a la estación transformadora Míguez, de 13,2 KV. Con ello, permitirá abastecer de energía limpia el equivalente al consumo anual promedio de 600 viviendas.

"Es uno de los cinco parques que se ganaron en la licitación del Renovar, que son los procesos de contratación de energía renovable que lanzó el Gobierno para cumplir con la ley 27.191. En su momento, Mendoza desarrolló a través de Emesa una serie de proyectos para garantizar que la provincia tuviera participación en ese proceso, porque hasta el 2015 nadie había invertido ni desarrollado ningún tipo de generación renovable", explicó Emilio Guiñazú, subsecretario de Energía y Minería de Mendoza.

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Esa ley a la que se refiere el funcionario fue promulgada en 2015 y sancionada en 2016, y tiene como meta la contribución de fuentes de energía renovables.

Estos proyectos de parques presentados por Mendoza tienen una particularidad y es que "todos tienen un alto contenido local", dijo Guiñazú. En el caso del parque que se está construyendo en el Este, se está haciendo con paneles fabricados en San Luis porque que la planta que los va a realizar en Mendoza todavía no está terminada, pero sí se estima que estará en funcionamiento para proveer a los próximos cuatro parques.

Desde el Gobierno provincial explicaron que tanto los 4.000 paneles, que ya están en Mendoza, como las celdas de media tensión, los transformadores, los tableros eléctricos y los seguidores solares, entre otros materiales fundamentales, son de fabricación nacional. Tan sólo aquellos elementos que no se producen en el país serán exportados y representan el 10% de los insumos.

"Todo esto está apuntado a la estrategia de Mendoza de transformarse en un cluster de tecnología y generación de energía renovable", agregó Guiñazú, quien remarcó que si bien es el más chico de los que se construirán, "es el primero y ayuda a consolidar el PASIP como parque industrial".

"Está en una buena zona, al igual que los otros parques proyectados. Todos están en una buena zona de radiación solar", dijo el funcionario sobre la ubicación elegida. Para ello se tuvieron en cuenta las características propias del suelo, la radiación recibida, la inexistencia de sombras provocadas por construcciones o vegetación, así como la cercanía con los polos industriales provinciales.

En cuanto a los trabajos específicos que se están realizando en este primer parque solar de Mendoza, desde Emesa detallaron: "La obra se encuentra en las primeras etapas de la fase constructiva.

Comenzaron las tareas de acondicionamiento y nivelación del predio, zanjeo, delimitación de áreas de proyecto, implementación de sistema de cámaras y seguridad, entre otras".