El PAIPPA fue el inicio de la inclusión de los campesinos

En vísperas de conmemorarse el vigésimo aniversario del lanzamiento del Programa de Asistencia Integral para los Pequeños Productores Agropecuarios, PAIPPA, el diputado Antonio Taboada reconoce que la esencia de esta idea gubernamental sin precedentes en el país hay que buscarla en el ánimo campesino de asociarse para conseguir sus objetivos ya que su comportamiento individualista nunca les permitió avanza hacia el mejoramiento de su realidad social y económica.

Considera que ese acontecimiento del 15 de septiembre de 1996 constituyó la alianza definitiva del estado provincial  con los campesinos.

Evoca que  estuvo presente ese día en el galpón de la desmotadora de General Belgrano donde el gobernador Insfrán formuló el significativo anuncio y que desde ese día se fijó la mirada en los pequeños productores que estaban excluidos del sistema económico y financiero y librados a su propia suerte.

Opina que con esa iniciativa transmitía su convicción que  el más humilde y desvalido eslabón de la cadena comunitaria merecía que el Estado se pusiese de su lado y  que , desde entonces, "se puso en marcha un proceso liberador para terminar con el clientelismo y canalizar toda la energía transformadora de que es capaz el campesino formoseño.

Recuerda el legislador que el PAIPPA fue instrumentado mediante Decreto Nº 1.107/96, con la finalidad de lograr el auto-sostenimiento, la ocupación y la autogestión productiva del pequeño productor y su familia, mediante un proceso de promoción social y desarrollo sostenido.

Taboada consigna que desde ese 15 de diciembre de 1996 se ofrece una solución social, productiva y ambiental a los pequeños productores.

Precisa que a partir de la titularización de la tierra, la construcción de las viviendas PAIPPA en su propia chacra , educación rural , salud, provisión de insumos y capacitación técnica, han alcanzado logros tangibles con la venta de sus productos en los principales mercados del país y fortalecido su proceso de comercialización a través de las ferias francas, generando un proceso de consolidación en la provincia que ahora avanza hacia la creación de la gran empresa social formoseña que será gerenciada por los propios campesinos que se convertirán en empresarios rurales.

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