Pagará hasta 30% más quien alquile o renueve contrato

Pagará hasta 30% más quien alquile o renueve contrato

El canon de un departamento de un dormitorio oscila entre los $ 3.000 y $ 5.000. Propietarios buscan que inquilinos se queden.

s contratos de los alquileres de 2015 ya llegan con incrementos propios. Eso sí, los hombres del sector inmobiliario dividen aguas y establecen que las subas llegan sesgadas; esto es, dependen de los fines de los inquilinos: si es para habitarlos o con fines comerciales.  

En el caso de los departamentos pequeños, de uno o dos dormitorios, las subas son más pronunciadas y pueden trepar hasta el 30% anual. 

“En general nosotros sugerimos a los propietarios fijar entre un 25 y 30% de incremento anual a la hora de celebrar nuevos contratos de alquiler o renovaciones.

Obviamente en términos generales y en caso de unidades habitacionales pequeñas que son las que poseen mayor demanda. Cuando son viviendas, al ser montos más altos, los incrementos son unos puntos porcentuales menores para poder así facilitar su alquiler, por lo que oscilan en el 25%”, señaló Miguel Astorga, presidente del Colegio de Corredores Públicos Inmobiliarios de Mendoza.

En Capital un departamento de dos ambientes puede valer entre 3.000 y 5.000 pesos y los valores son similares en los distintos departamentos del Gran Mendoza en función de las comodidades de la propiedad. 

Para sacar cuentas y según Astorga, entre 2012 y 2014, la suba de expensas fue del 95,6%. 

“En una unidad de 40 metros cuadrados hoy puede pagar $ 3 mil de alquiler, en tanto la expensas puede ser de $ 700. Sumado a los impuestos, tasas municipales, es evidente que hoy hay que ser prudentes a la hora de fijar subas en los alquileres de los locales comerciales”, dijo Astorga.

Otras voces del sector como José Luis Ruiz, de Inmobiliaria Ruiz; Carlos Farina, de Inmobiliaria Farina; y Santiago Debé, de Inmobiliaria Debé también fijaron y afirmaron que los incrementos de alquileres para este año oscilan entre un 25 y 30%.  

Los montos y sus incrementos, según Astorga están determinados por cálculos matemáticos pero también por lo que fija la oferta y demanda. 

Atrás quedaron las épocas donde los propietarios obtenían una rentabilidad anual del 1% mensual.

Hoy, y ante una recesión y con inquilinos dispuestos a pagar valores más bajos, la rentabilidad para los propietarios oscila entre el 0,3 y 0,4% mensual.

“Una casa valuada en $ 650 mil hace unos años atrás el mercado locativo podía fijar su alquiler en los $ 6.500. Esa cifra es abultada al presente y estamos alquilándola entre $ 3.500 y $ 4 mil, por lo cual aquel 1% del pasado de rentabilidad ha quedado atrás”, apuntó Astorga.

Dinamismo evidente

De cualquier manera en este verano tórrido la temperatura de la oferta para alquilar sigue en alza hasta tal punto que según Debé, en el Gran Mendoza existen 600 departamentos aptos y disponibles para ser rentados. 

“Afortunadamente la oferta es robusta para los que quieren alquilar. En parte por la gran cantidad de propietarios, que al no poder vender sus viviendas debido al cepo al dólar y el temor de que usurpen su propiedad deciden destinarlas al mercado locativo y posibilita que las opciones de alquileres se multipliquen”, señaló Debe. 

Más aún si hace unos años una propiedad, por ejemplo una vivienda, tenía una espera entre 7 y 10 días para alquilarla. Ahora, según Astorga, es de hasta 30 días. En su visión, los plazos se alargaron porque los inquilinos se encuentra  con una gran oferta de inmuebles. 

Desde el lado de los inquilinos al perder su poder adquisitivo y por lo tanto no poder llegar a comprar un inmueble, se vuelcan con mayor asiduidad, según Farina, al mercado locativo. 

Lo que determina para Ruiz que el sector inmobiliario esté soportando la baja en la venta de inmuebles, gracias exclusivamente a los alquileres, un subsector que muestra un dinamismo evidente. 

“Muchas de las inmobiliarias están subsistiendo por la administración de las propiedades; hoy es uno de los motores principales de nuestra actividad”, acotó Debé. 

Recordemos que el mercado inmobiliario viene castigado desde que se instrumentó el cepo al dólar a fines de 2011. 

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