El acta fue rubricada el martes 2 a las 18,30, y por el sindicato petrolero de Neuquén, Río Negro y La Pampa participaron además de Pereyra, Ricardo Astrada, y Marcelo Rucci, el actual intendente de Rincón de los Sauces.

Se acordó la “suspensión ordenada y rotativa” de los trabajadores que no tengan actividad asignada en las empresas, entendiéndose por rotativas que afectarán por etapas a todo el personal, que irá, precisamente, rotando entre quienes están en actividad y quienes no; y quienes sean suspendidos percibirán el 50 por ciento del salario, a modo de subsidio, que no podrá superar en ningún caso los 40 mil pesos por trabajador.

Durante el tiempo que duren las suspensiones, las empresas se comprometieron a no despedir personal. “Las partes se comprometen a preservar y garantizar  la paz social”, se sostiene, textualmente. Al mismo tiempo, se expresa el compromiso de verificar las situaciones de personal en condiciones de jubilarse, para dar trámite rápido a esos expedientes y proceder, de esa manera, a un achicamiento de las plantas laborales.

El acuerdo fue rubricado con la Cámara de Empresas de Operaciones Petroleras Especiales, y recibió la adhesión explícita de YPF, con la presencia del CEO de la empresa, Alfredo Galuccio.