Otro cruce entre Gobierno y Corte

Otro cruce entre Gobierno y Corte

El supremo Pérez Hualde profundizó la grieta con la gestión Cornejo en un artículo publicado en Los Andes. “Nos estamos ocupando de los problemas que la gente necesita que le resuelvan”, replicaron en el Gobierno.

El enfrentamiento entre parte de la Suprema Corte de Justicia y el Gobierno provincial no cesa. Por el contrario, sigue sumando ingredientes en la lucha en torno a la postulación de José Valerio para ocupar un lugar en ese tribunal.

Eso se comprobó con un artículo de opinión publicado ayer en Los Andes por el ministro de la Corte, Alejandro Pérez Hualde, que lógicamente, no cayó para nada bien en el Ejecutivo.

“Nosotros nos estamos ocupando de los problemas que la gente necesita que le resuelvan”, aseguraron fuentes oficiales claramente enojadas con la toma de posición del ministro de la Corte.

Pero también hubo quien aseguró que “hace falta más jueces que trabajen todo el día y no que se la pasen dando clases por el mundo”, en clara alusión a los continuos viajes que algunos miembros de la Corte harían y que disminuye su capacidad de trabajo en el tribunal en el que están nombrados de forma vitalicia.

Y en el enojo, hasta calcularon: “La Corte saca -con muchos más recursos- la misma cantidad de sentencias que una cámara civil”. Durísimo.

Así quedó otra vez en claro las posturas disímiles sobre la responsabilidad y el alcance de cada uno de los poderes en la solución de la problemática de la inseguridad, y especialmente de lo que popularmente se ha conocido como “la puerta giratoria” y el posicionamiento “garantista” que Pérez Hualde avala y a la que el gobernador Alfredo Cornejo definió en los últimos días como de “sacapresos”.

En el artículo, titulado “Los jueces y la razonabilidad”, el supremo tomó posición del lado de los llamados “garantistas”, frente a la postura “mano dura” que el Gobierno pretende reforzar porque entiende que la Justicia sólo pone en la balanza los derechos de los acusados de delitos en detrimento de sus víctimas.

Bajo esa impronta, Cornejo impulsó a la Procuración a Alejandro Gullé y también pretende que Valerio supere la instancia del acuerdo del Senado para que el máximo tribunal tenga en su seno “las dos visiones del Derecho”.

A pesar de renegar de esa puja conceptual, Pérez Hualde reivindica una acordada de esa Corte en línea con los reclamos de organizaciones de Derechos Humanos. Además hace cuestionamientos sobre el accionar del Gobierno en lo relacionado a las detenciones y su posterior procesamiento judicial. Y también critica palabras de Valerio, a quien no nombra, pero lo lleva al terreno de la “barricada política”.

El fallo en cuestión, fue emitido por la Corte el 23 de diciembre de 2015, cuando el cuerpo hizo lugar a un habeas corpus “correctivo y colectivo” por la situación de las prisiones preventivas en las cárceles locales, a partir de la denuncia de la organización de Derechos Humanos Xumec, la que ahora también se sumó a los detractores de Valerio para llegar al máximo tribunal.

En el Gobierno ayer no hubo respuesta oficial a la opinión de Pérez Hualde. Aunque sí hubo voces que criticaron al juez por citar ese fallo.

Y resaltaron algunos aspectos de esa sentencia, como la parte en la que la misma Corte habla de que “no corresponde prisión preventiva” a un acusado, por más que se sepa que es culpable, “si se tiene la certeza de que no eludirá la acción de la Justicia”. El párrafo, parece avalar esa presunción del Gobierno que ni aunque una persona sea culpable, terminará en la cárcel. El “anarco-abolicionismo” del que habla Valerio.

En otro párrafo, Pérez Hualde habla de que la Corte se está ocupando de “revisar las detenciones”, pero cuestiona a la cartera de Seguridad, que conduce Gianni Venier.

“Desde el Ministerio se informa haber detenido a 760 personas en septiembre, pero sólo se presentaron ante nuestros jueces 217 detenidos y de ellos en el 80% se confirmó la privación de libertad de acuerdo a la nueva legislación (...), ¿y los otros más de 500 detenidos?” se pregunta.

El Gobierno también tuvo respuesta para esto. Entre dientes señalan que hay fiscales que recibieron a esas personas, pero que no las mandaron a las audiencias de detención. Es decir, entienden que el problema está del lado de la Justicia. Y se ofuscan más cuando recuerdan “los métodos K de denigrar personalmente y de ignorar los datos reales del sistema”, algo que a su entender, estaría haciendo Pérez Hualde.

En otro punto, el supremo trata de “inexplicable” la frase “de que todo ‘delincuente’ debe esperar su sentencia ‘en prisión’, o ‘la ley se aplica, no se interpreta’”.

La frase también pertenece a Valerio. Pérez Hualde la critica. “Es entendible desde la barricada política -pero no en un profesor universitario de trayectoria”, señala.

Voces oficiales criticaron que el magistrado se inmiscuya en lo penal, cuando él proviene de lo administrativo. “Ignora que reo o delincuente es parte del lenguaje del proceso penal”, dicen.

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