Tanto Recabarren como Kusminsky y Pérez Gras aclararon que no existe deuda alguna entre OSEP y el hospital, y además aseguraron que en caso de que hubiera deuda, esta nunca interferiría con el proceso de transplantes de médula del cual depende la vida de los pacientes a los que se les indica esta práctica, y que el servicio no ha sufrido ningún tipo de resentimiento o funcionamiento anormal.  Con respecto a las posibles dilaciones que algunos pacientes experimentan, Kusminsky explicó que el proceso de transplante de médula es complejo y requiere de la detección de un donante en listados internacionales, y esa búsqueda se inicia después de un trámite en el que interviene, además de las instituciones mencionadas, el Instituto Nacional Central Único Coordinador de Ablación e Implante (INCUCAI). Es en este procedimiento donde, dependiendo del caso, puede haber algunas demoras administrativas que nada tienen que ver con le relación entre la Obra Social y el nosocomio.

Finalmente, se acordó entre las autoridades de OSEP, los profesionales y los Senadores presentes la inmediata redacción de un protocolo que agilice todos los trámites posibles en el plano administrativo y se respaldó fuertemente la necesidad de apoyar el proyecto iniciado por el Minsiterio de Salud de la Provincia de Mendoza para habilitar un centro de transplantes de médula en Mendoza que atienda los casos de la zona Cuyo.