La oposición exigió más consenso y criticó el acto

Dirigentes partidarios pidieron más diálogo y cuestionaron la decisión oficial de mantener el festejo pese a las muertes
Dirigentes de la oposición destacaron que se deben enfrentar, a través de un consenso político amplio, las deudas pendientes de la democracia argentina. También hubo críticas a los festejos organizados por el Gobierno a 30 años de la asunción de Raúl Alfonsín en la Plaza de Mayo, en el contexto de conflicto social que se vive desde hace una semana en distintas provincias del país.

El principal referente del Frente Renovador, el diputado Sergio Massa, evaluó que el acento debía ser puesto en la necesidad de un consenso para enfrentar los desafíos pendientes, antes que en la polémica sobre el acto: "Más allá del hecho puntual del festejo, creo que 30 años de democracia es una gran oportunidad para que la Argentina tenga un Consejo Económico y Social que sea un ámbito institucionalizado de diálogo". En su opinión, "la continuidad democrática marca un piso para los nuevos desafíos", entre los que destacó "el respeto, la unidad en la diversidad y los proyectos para el largo plazo".

Massa indicó también que "treinta años es un período suficientemente largo como para que, en lugar de estar angustiados por esta situación, estemos festejando".

El diputado socialista Hermes Binner expresó su oposición a los festejos en un comunicado conjunto con dirigentes del FAP: "Celebramos los 30 años de democracia, pero no podemos festejar mientras hay muertos en las calles del país. Los argentinos trabajamos mucho para consolidar la democracia, pero aún quedan deudas pendientes en la sociedad que terminan siendo el caldo de cultivo para la acción de grupos minoritarios".

Además, convocaron "a todas las fuerzas sociales y políticas a iniciar con seriedad, amplitud y diálogo un camino de entendimiento para avanzar definitivamente hacia una sociedad más justa y sin excluidos".

El senador de UNEN Fernando "Pino" Solanas se sumó al pedido de un diálogo para enfrentar los conflictos que se desataron a partir del acuartelamiento de la policía cordobesa, al convocar al Gobierno y a todos los sectores sociales a "resolver los conflictos dentro del marco del respeto, la legalidad y asegurando la democracia para ganar una auténtica paz social". Y agregó: "Vemos con profunda preocupación que la falta de justicia social, la desigualdad, la impunidad para los poderosos y los corruptos y los saqueadores de lo que es de todos los argentinos siguen siendo la gran deuda pendiente".

"Hoy para nosotros es un día de duelo. No de festejo. El duelo del país debe ser generalizado", opinó desde las redes sociales la diputada Elisa Carrió. También apuntó contra lo que definió como "la indiferencia del Gobierno frente a los muertos, y los saqueos, que parecen ser organizados, hablan de algo muy raro que está ocurriendo y no descarto que sean protagonistas sectores del propio gobierno de Cristina".

Mauricio Macri también evaluó ayer que los festejos debían ser pospuestos, al indicar en declaraciones radiales que "festejamos algo que deberíamos haber postergado por respeto a todo lo que está pasando en el país, es una decisión del gobierno nacional". En concordancia con esta opinión, Pro decidió suspender su festejo de fin de año que estaba previsto para la noche de ayer.

RECHAZO RADICAL

De un modo orgánico se pronunció la UCR contra la realización de un festejo ante el trasfondo de conflicto que se vive en distintas provincias: "Los sucesos que estamos viviendo en estos días aconsejan suspender los festejos programados para hoy por el gobierno nacional. Cuando hay muertos, saqueos y violencia en vastos sectores del territorio argentino, no son momentos para shows, sino para trabajar enérgicamente a fin de superar ese trance y reparar los daños".

El lunes, Ricardo Alfonsín había sugerido suspender los festejos y "aprovechar este acto formal para suscribir un compromiso de defensa de la democracia y sus instituciones". El dirigente radical aclaró que decidió participar del acto en la Casa Rosada porque creía que no era un festejo, pero mantuvo su crítica al evento en la Plaza de Mayo.

También manifestaron su oposición a la realización del acto los referentes de Confianza Pública Graciela Ocaña y Daniel Amoroso: "La Presidenta debe suspender el acto partidario, convocar a la pacificación y volver a llevar calma a las zonas en conflicto, en tanto las fuerzas policiales deben entender que la modalidad de sus reclamos, más allá de la justicia que tengan, no se corresponde con personas armadas en defensa de la ley".

REFLEXIONES POR LOS 30 AÑOS DE DEMOCRACIA

Sergio Massa - Diputado Frente Renovador

"Más allá de los festejos, es una oportunidad para crear un diálogo institucionalizado en la Argentina"

Hermes Binner - Diputado FAP

"Celebramos los 30 años, pero no podemos festejar mientras hay muertos en las calles del país"

Elisa Carrió - Diputada UNEN

"Hoy es un día de duelo. No de festejo. El duelo del país debe ser generalizado"

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