Si las promesas del Ejecutivo local se cumplen, este año será muy intenso en cuanto a obra pública. De hecho, en el presupuesto municipal aprobado a finales de 2016, los proyectos a ejecutar en el presente ejercicio suman, en total, unos 270 millones de pesos. Si a eso se le suman los 188 millones correspondientes al Desagüe Norte, que se anunciaron  luego de que el Concejo Deliberante diera el visto bueno al cálculo de gastos y recursos, se espera que a fin de año se hayan volcado a la ciudad casi 460 millones de pesos en infraestructura.

Más allá de las iniciativas de gran envergadura –como el citado desagüe, la pavimentación de la Circunvalación, el Cuadrante Noroeste y la finalización de la nueva terminal de ómnibus– hay un aspecto clave para el Ejecutivo local y es la extensión de las redes de agua y cloacas.

“Estas son obras que van bajo tierra y no se ven, pero que mejoran sustancialmente la calidad de vida de nuestros vecinos”, decía hace un mes el intendente, Pablo Petrecca, mientras presentaba los avances en la extensión de las cloacas en el barrio Martín Miguel de Güemes.

Tanto es así, que el municipio plantea sumar en este año más de 260 cuadras a estas prestaciones, según lo confirmó el titular de Obras Sanitarias Municipales, Guido Covini.

Asimismo, el funcionario adelantó los trabajos que se harán en la planta de líquidos y la planta depuradora, y se mostró confiado en que, al finalizar el mandato del jefe comunal, todo el casco urbano contará con ambas prestaciones básicas.

Extensión de servicios

De acuerdo a los datos de Obras Sanitarias, en la actualidad poco más de un 80 por ciento de la ciudad cuenta con agua y cloacas. Las autoridades del organismo señalan que “es difícil de establecer el porcentaje en términos exactos porque hay algunos problemas con conexiones no declaradas”.

Pero a partir de este escenario, Petrecca planteó públicamente que su meta era llegar al 100 por ciento de la población con ambas prestaciones elementales al final de su mandato.

Covini ratifica que el objetivo sigue siendo el mismo: “Es algo muy ambicioso, darle agua y cloacas a todo el casco urbano, como así también, llegar a los partidos”.

En términos concretos, en Obras Sanitarias planean sumar en este año 264 cuadras de cloacas y 262 de agua corriente, en obras que serán financiadas con fondos municipales.

“Estamos terminando el barrio Martín Miguel de Güemes, en el Cuadrante Noroeste ya hicimos trece de las catorce cuadras y media de cloacas planificadas, ahí vamos a hacer veinte cuadras de agua, y después tenemos proyectado continuar en distintos barrios periféricos de la ciudad”, agrega Covini.

En cuanto a las ciudades del partido, se están terminando de hacer los proyectos para Morse y Agustín Roca, de manera de poder asistir a esos pueblos con los servicios.

Para Covini es importante remarcar que se modificó la metodología de trabajo de Obras Sanitarias: “Anteriormente se juntaban los vecinos, hacían un consorcio, pagaban la obra y se hacía. Ahora los trabajos por la extensión de la red son financiados con fondos municipales”, y el frentista solamente abona el costo de la conexión de su inmueble al caño maestro.

Con todo, el joven funcionario se muestra convencido de que en 2019, cuando termine el mandato de Petrecca, el casco urbano va a estar cubierto con estos servicios. “No es una utopía –sentencia–, hay que aprovechar que hay fondos y ganas de invertir, es un momento en el que se ve otra cosa, los mismos trabajadores de Obras Sanitarias dicen que antes no había dinero, por eso hay que explotar este momento para mejorar la infraestructura”.

Obras adicionales

Para aumentar la cantidad de conexiones de cloacas es inevitable hacer otras obras que permitan que el sistema pueda absorber una mayor cantidad de usuarios.

Uno de esos trabajos debe realizarse en la planta de líquidos ubicada en Borchex, entre Carlos Tejedor y Julio Campos, donde desembocan los desechos de los troncales y de ahí son derivados para a la planta depuradora, ubicada a unos nueve kilómetros de allí.

“El crecimiento del servicio tiene que ir acompañado con la capacidad de bombeo de los líquidos cloacales, entonces estamos trabajando en un proyecto de ampliación de esa planta”, explica Covini.

En este momento, el grupo de ingenieros y técnicos está se está armando el pliego, que es muy específico, para luego hacer la obra, que permitirá incorporar a la red a más de siete mil usuarios. En la actual, hay alrededor de 30 mil conexiones, que atienden a 80 mil personas, aproximadamente.

“Esto va de la mano con lo que se está haciendo en la planta depuradora –añade Covini– que en este momento está en una etapa de diagnóstico de las unidades, del funcionamiento de la parte electromecánica y de la parte civil. Con los resultados de ese análisis, se va a determinar si es necesario refaccionarla o armar una en paralelo”.

Con todo, el titular de Obras Sanitarias subraya que ambas plantas pueden funcionar en la actualidad, pero con el crecimiento que está proyectado para los próximos 30 años, se va a necesitar otra infraestructura, que es la que es está planificando.

La obra de la planta depuradora se va a hacer con recursos provinciales, mientras que el pozo de bombeo en la planta de líquidos será financiado con fondos municipales, que vienen de un convenio con la Gobernación.

Para los funcionarios esta obra resulta clave porque permitirá tener mayor capacidad de bombeo, seguir extendiendo la red a otros barrios y rehabilitar el troncal que viene desde la Unidad Penitenciaria N° 49 y presenta numerosos inconvenientes.

Pozos

Otras obras adicionales que requieren la extensión de la red de agua corriente es la proyección de nuevos pozos. Es que este servicio se presta a través de pozos de bombeo y si se suman muchas conexiones, es probable que sean necesarios más para que no saquen presión de red en otros lugares.

En ese contexto, todavía no se sabe cuántos pozos nuevos deben hacerse, dado que eso se va midiendo y de acuerdo a las necesidades, se hacen o no.

Hoy en Junín hay 66 pozos y están todos funcionando. “Hay que tener en cuenta que esto se vincula con la red eléctrica por lo que, ante cualquier variación en la tensión voltaica, el motor del pozo se para para no generar ningún problema eléctrico”, puntualiza Covini.

Desde Obras Sanitarias se están poniendo dispositivos en los pozos para monitorear su funcionamiento de manera remota y a través de un teléfono celular. “Con este sistema vamos a poder ver lo que sucede” antes de enviar la cuadrilla y así optimizar el tiempo y los recursos. Por medio de esta iniciativa, que comenzó en la gestión de Mariano Petraglia al frente del organismo, hoy 25 pozos que tienen estos dispositivos funcionando y el objetivo es llegar con el sistema a la totalidad.

Trabajo diario

El ingeniero Covini asumió al frente de Obras Sanitarias en noviembre. Antes se había desempeñado en el Ente Nacional de Regulación del Gas (Enargas), y en las empresas Gas Natural Fenosa (de España) y Gas Natural Ban.

“Acá me encontré con un grupo realmente bueno –explica–, con sólo entrar a Obras Sanitarias, uno ve que la gente que está ahí hace su trabajo con pasión, porque es un servicio esencial. En cada cosa que necesité, el personal me dio su respaldo y yo veo que tienen la camiseta puesta. Para trabajar acá tenés que tener mucha vocación”.

Hoy en día hay 80 personas en esta dependencia, entre el personal administrativo, cuadrillas, trabajos externos, electromecánica y demás.

En cuanto a la infraestructura y herramientas, Covini admite que “hacen falta cosas”, pero confía en que de a poco se va a mejorar en ese aspecto: “Hay que tener en cuenta que el municipio venía golpeado, como explicó Pablo, yo no provengo de la política pero basta con ver los balances para darse cuenta de lo que era, había deudas con todos los proveedores, nadie quería vendernos nada, entonces fue un trabajo arduo para volver a generar confianza entre el Estado y los proveedores. Ahora veo que la rueda está girando”.

Finalmente, en lo que respecta a sus pocos meses en la gestión, destaca que “este año no hubo problemas de presión de agua, básicamente porque se cuenta con una buena provisión de stock de repuestos en caso de que se rompa alguna bomba de un pozo, eso es muy importante para no dejar a la gente sin este servicio tan esencial”. De acuerdo a su análisis, considera que “el vecino está contento con el trabajo” que se hace en esta delegación.