Durante el último fin de semana, decenas de personas volvieron a tomar terrenos en el predio privado del barrio Pirayuí. La mayoría viene con estructuras de maderas que permite el armado rápido de las casas. Desde diciembre que no hay control policial estable. Vecinos de las 550 Viviendas comienzan a ver con preocupación la reactivación de los ocupantes.

Los propietarios de los terrenos insisten en que desean recuperar las tierras tomadas en julio del año pasado. Pese a que realizaron la denuncia ante la Justicia no hubo avances en las negociaciones. Es más, en el mes de diciembre de 2012 se decidió sacar el control policial que existía en la zona del puente blanco y el acceso que los habitantes de las 500 Viviendas del Pirayuí tienen por la Ruta Nacional Nº12.

Pese a esta situación, cientos de familias decidieron abandonar la lucha por los inconvenientes que generan las altas temperaturas.

Los que resistieron fueron fortaleciéndose tanto en lo anímico como en lo material. Para muestra hay que mencionar que en los últimos tres meses se construyeron casas prefabricadas con estructuras sólidas -planchas de maderas terciadas, chapas de cinc-. Además se extendió la conexión ilegal de agua y energía eléctrica.

Se calcula que sólo cien familias resistieron la embestida de los calores y las tormentas que hubieron desde julio pasado a la fecha. Pero con la llegada del otoño, muchas decenas de familias decidieron instalarse en el predio tomado hace 8 meses.