El gobierno rionegrino convocó para el lunes a Unter para retomar la negociación salarial, mientras resolvió descontar a los docentes hasta nueve días de paros en los dos próximos cronogramas. Este esquema –que hoy será anunciado– se aplicará en los salarios de abril y de mayo, con quitas que podrían llegar a entre el 25% y el 30% por mensualidad, en los casos de los trabajadores a los que se liquide la totalidad de las jornadas de huelga.

La administración provincial respondió con dos acciones contrapuestas. Trabajo llamó a paritaria para el lunes a partir de las 16 y se buscará un “acuerdo definitivo. Siempre buscamos el diálogo, el consenso y esperando que la situación mejore”, declaró el gobernador Alberto Weretilneck.

La otra medida jaquea al sector docente porque programa el efectivo descuento de los días de paro.

Frente a la consulta de la huelga de ayer, el mandatario confirmó que se informaría por la tarde un “cronograma o forma de cómo se descontarían los paros de septiembre pasado, de marzo y de abril”. Suman 13 jornadas: cuatro del mes del 2016, y nueve del actual ciclo escolar.

El anuncio gubernamental se postergó para hoy, según lo informado anoche por Casa de Gobierno. Pero trascendió que el esquema diseñado –por ahora– se concentra en los nueve días del 2017: cinco jornadas serán liquidadas con los haberes de abril, y cuatro con mayo. En cambio, los paros de septiembre quedarán pendientes seguramente de la negociación.

El desdoblamiento –explican en el gobierno– pretende atenuar el impacto de las quitas de abril y mayo. Aún así, cinco días menos equivalen a un 25% a 30% de rebaja, siempre dependiendo de la forma de aplicación. Es cierto que esta determinación se traduce en otra presión a la Unter en la negociación salarial del lunes, considerando que los docentes todavía no recibieron ninguna suba en sus ingresos cuando el resto de la administración accedió –en general– a un 10 % en los sueldos de marzo.

La última propuesta de Educación fue de un 10% en marzo, un 5% en mayo y un 3% en septiembre, pero el gremio la rechazó y lanzó un plan de lucha. Ayer, Weretilneck aceptó que el lunes existiría una “nueva oferta”, consistente en “algunas modificaciones” a la ya realizada.

Uno de los puntos que podría ser parte de la propuesta es dejar abierta la oferta ante eventuales incrementos inflacionarios que superen la pauta de mejora acordada.

–¿El “cronograma” de descuentos no tensará más relación? –se lo consultó al mandatario.

–No existe –respondió– ninguna posibilidad de no descontar los días de paro. El Estado provincial paga para trabajar. Existe el derecho de la medida de fuerza y el Estado tiene la obligación de descontar por un servicio no prestado. Es un camino de ida y vuelta.

Durante varios años los descuentos fueron siempre materia de negociación entre gremio y gobierno.