"Necesitamos aggiornarnos a los tiempos que corren"

En el acto, autoridades provinciales y municipales resaltaron la figura del fundador de la institución. El actual director Julio Dunogent dijo que el desafío es "dar respuestas a las actuales necesidades de la población".

El jueves a la mañana, el Hospital Interzonal Domingo Cabred, de la localidad de Open Door, celebró sus 110 años de vida. Por tal motivo, se realizó un acto en sus instalaciones. La conmemoración contó con la participación de funcionarios provinciales del área de Salud, y de la intendenta Graciela Rosso.

Además de resaltar la figura del fundador de la institución, los oradores valoraron el presente del nosocomio y se mostraron optimista con respecto al futuro.

El actual director del Hospital Cabred, Julio Dunogent, explicó que la fundación de la institución representó una revolución para el país en materia de atención a pacientes mentales.

Según el profesional, la iniciativa concretada a fines del siglo XIX permitió "tener control hospitalario, pero con la posibilidad de una recuperación terapéutica a través del trabajo".

"Hasta ese momento, los pacientes estaban en cárceles comunes como ladrones comunes y no se hacía distinción entre pacientes psiquiátricos. Estas instituciones, como también la Colonia Montes de Oca de Torres, tienen características muy particulares. Hay que comprender el momento en que fueron hechas", agregó Dunogent.

El director explicó que en la actualidad se busca que el paciente sea externado, a partir del proceso denominado desmanicomización, algo que necesita de un hospital "aggiornado a los tiempos que corren".

"La patología mental ha cambiado porque socialmente hemos cambiado. Actualmente tenemos un problema muy serio que es el de la drogadicción. El equipo de salud tiene que ser multidisciplinario. Nuestro desafío es que nuestro hospital dé respuestas a las necesidades actuales de la comunidad. Las comunidades son activas, y nuestra comunidad es muy diferente a cuando se formó la colonia", dijo Dunogent, y convocó al equipo de trabajo de la institución "a seguir haciendo el esfuerzo de mejorar este hospital".

PROVINCIA Y MUNICIPIO

Aníbal Areco, en su carácter de director de Salud Mental de la provincia de Buenos Aires, recordó su paso por el nosocomio, primero como psiquiatra en el Pabellón 1, y posteriormente como director.

Areco expresó que "el trabajo que hace el Ministerio de Salud apunta a dar la mejor atención a los pacientes y de la manera más moderna, trabajando en la externación y en el contacto con la comunidad, en definitiva para la resocialización de los pacientes".

El director de hospitales del gobierno bonaerense, Sergio Alejandri, se refirió al cambio en la Dirección del centro de salud, ocurrido hace un año: "Sin criticar gestiones anteriores, entendíamos que existían una serie de falencias y problemas que tenían que ser encarados de forma inmediata.

El nombramiento del actual director ha sido una decisión acertada. Si bien faltan montones de cosas por hacer, la labor desarrollada durante este año de gestión ha cambiado muchas cosas".

Antes de la proyección de un video institucional, Rosso volvió a destacar la figura de Domingo Cabred. La jefa comunal lo calificó como "un precursor, como un adelantado en lo que eran las políticas de salud mental en aquellos momentos".

"Lo que hizo Domingo Cabred fue muchísimo, porque fue devolverle dignidad a las personas que estaban con una enfermedad. Lo que había que hacer era trabajar conjuntamente pensando que no es sólo un problema de salud, sino que hay que tener una visión integral. Cabred tuvo la visión de hacer que el cambio fuera en libertad. Esto también es importante. Las políticas de salud mental han ido cambiando, pero el concepto de la libertad no ha cambiado", agregó.

El fundador

Domingo Cabred es considerado uno de los grandes médicos psiquiatras de la Argentina.

En 1881 se doctoró en Medicina en la Universidad de Buenos Aires. A partir de ese momento se especializó en enfermos mentales, orientación que lo llevó a trabajar durante tres años en el Hospicio de Mujeres y luego en el Hospicio de Mercedes. En paralelo a su actividad médica, incursionó en la docencia universitaria.

La gran obra de Domingo Cabred llegó en 1899, con la creación del Hospital Interzonal de la localidad de Open Door. Desde sus orígenes, la institución tuvo un criterio que respondía a la idea "de un asilo abierto, de allí su nombre, donde se aplicaban los métodos más avanzados a nivel mundial".

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