La Justicia Federal de Córdoba investiga la hipótesis de que la carta, presuntamente escrita de puño y letra del oficial Juan Alós, haya sido “plantada” en la escena del crimen, según denunció el representante legal de la viuda Roxana Luna, el doctor Carlos Nayi.

A la cuestionada “escena” del presunto suicidio del uniformado mencionado como supuesto miembro de la banda de los “narcopolicías” se le suma este elemento no menor, ya que el fiscal de Instrucción, Emilio Drazzile, insistió en la importancia de la misiva, al razonar sobre los motivos de la trágica decisión.

Cabe recordar que la enmienda, también había sido cuestionada por la viuda por el modo de expresión que había utilizado Alós, desde el mismo encabezamiento, donde habla de Roxana cuando nunca la llamó de ese modo.

A ello se agrega que en los últimos días se conoció graves irregularidades en las que se habría incurrido en la madrugada del 7 de setiembre pasado en el camino a Bosque Alegre, donde Alós fue hallado con un tiro en la cabeza en un Renault Clio, vehículo perteneciente a la división Drogas Peligrosas de la Policía.

El vehículo, actualmente en el subsuelo de la Jefatura, fue lavado en su interior y posteriormente alojado en ese lugar, sin que el fiscal ordenara el secuestro y la preservación para posteriores pesquisas de la Policía Judicial. Incluso, trascendió que a los peritos del organismo judicial les habría comunicado que no se llegarán al lugar porque no era necesaria su presencia ante la hipótesis “clara” del suicidio por parte de Drazzile, que también era apoyada por los anteriores representantes legales de la viuda, que supuestamente habían sido aportados por la propia Policía, es decir, por el gobierno delasotista.

Al respecto de los cuestionamientos a la justicia provincial, ayer el gobernador De la Sota insistió en ser respetuoso de la división de poderes, aunque refirió que «yo no he visto a ningún fiscal de Córdoba que tenga denuncias hechas porque se le haya perdido droga en su despacho». Además dijo: «Creo que la Justicia de Córdoba es ejemplar».

El “narcoescándalo”, a partir de la emisión del testimonio de Juan “El Francés” Viarnes, descabezó la cúpula policial e hizo caer al ministro de Seguridad de la Provincia, Alejo Paredes.

Además, desmembró la Dirección de Lucha contra el Narcotráfico de la Policía, cuyo titular -el comisario mayor Rafael Sosa- y otros cinco miembros están detenidos e imputados. Otros tres jefes policiales siguen libres pero están acusados en la investigación del fiscal federal Enrique Senestrari.

Habló Viarnes de nuevo

En una nota brindada a Radio Nacional Córdoba, “el Francés” Viarnes sostuvo que la “ruta del dinero” llegaría hasta el mísmisimo ex ministro Alejo Paredes.

«Eran migajas con lo que se quedaban estos policías», sostuvo el agente civil provocador que participaba de los procedimientos policiales y los “negociados” con el mundo de la droga. Viarnes hacía referencia a los detenidos Saine, Peralta Datoli, Osorio y Argüello.

«De (Rafael) Sosa para arriba eran los que cobraban mucho más», recalcó, dejando entrever en otro párrafo que estaban incluidos el jefe de Policía y el propio ministro.

Hace unos días, la Justicia Federal realizó el tercer allanamiento en Jefatura, más precisamente en la Dirección de Finanzas, para tratar de establecer los estados patrimoniales de los uniformados investigados.