Marcelo Ferreyra había sido trasladado en el Instituto del Quemado a raíz de las graves lesiones que sufrió en la explosión, que se produjo por una pérdida en una garrafa o tubo de gas, en el mediodía del domingo en la vivienda que ocupaba en Roma al 800, cuyos restos y vidrios se expandieron por más de 40 metros. La casa, que terminó destruida, se incendió.

El hombre, único morador de la casa, resultó herido con graves quemaduras, por lo que fue trasladado primero al Hospital Gumersindo Sayago de Villa Carlos Paz y luego al Instituto del Quemado, en la Capital cordobesa. 

Por su parte, ayer se informó que continuaban internados los miembros de una familia, tras la explosión de una garrafa en una vivienda ubicada sobre calle Las Artes al 1.400, en Mina Clavero. Resultaron heridos seis adultos jóvenes, entre hombres y mujeres, y un bebé de 3 días.