Un hombre de 64 años perdió la vida en un accidente doméstico al explotar un tanque de 200 litros con restos de material altamente inflamable.

El siniestro se produjo cuando la víctima intentó cortar el tanque con una amoladora, aparentemente con la intención de construir un parrillero. Sin embargo, las chispas entraron en combustión rápidamente al tomar contacto con el producto y provocó una gran explosión.

El estruendo y la onda expansiva se pudieron oír a varios metros a la redonda e incluso ocasionaron la rotura de vidrios en al menos dos locales ubicados en las inmediaciones.

La víctima, identificada más tarde como Norberto Oscar Balmaceda, falleció en el acto como consecuencia de la explosión.

 

Una muerte absurda

El hombre residía solo en una gomería ubicada sobre avenida Rocha 727, entre Saavedra y Dorrego, de nombre “El 22”.

Transcurrían las 10:00 de la mañana cuando Balmaceda se disponía a cortar un tanque de 200 litros con la intención de construir un parrillero, explicó una fuente abocada a la investigación.

Con ese propósito la víctima tomó una amoladora y comenzó a cortar desde la tapa, sin percatarse que el envase metálico contenía restos de un material altamente inflamable. El descuido fue fatal para este hombre de 64 años, ya que ni bien las chispas entraron en combustión con el producto que había dentro del tanque provocaron una gran explosión y no le dieron tiempo a reaccionar.

Para tener mayor dimensión de lo que fue el estallido, la tapa del tanque fue hallada más tarde en el techo del Club Compañía, ubicado al lado de la gomería, en tanto que la onda expansiva provocó la rotura de vidrios en dos locales comerciales ubicados a pocos metros.

En cuestión de pocos minutos se acercaron al lugar vecinos y ocasionales transeúntes, situación que obligó a las fuerzas de seguridad a colocar una cinta para demarcar el área y permitirles a los peritos de la Policía  realizar las tareas correspondientes.

El escenario del hecho fue para muchos curiosos realmente impactante, ya que la magnitud de la explosión mutiló el cuerpo de la víctima y partes de las vísceras se podían ver en la vereda.

El episodio generó una gran conmoción en los habitantes de la zona que conocían a la víctima y en el transcurso de la jornada de ayer tuvo amplia repercusión en la comunidad pergaminense por las características del caso.