La Intendencia de San Luis quiere iniciar la remodelación de la avenida Illia en enero. Pero algunos concejales de la comisión de Obra Pública creen que el primer mes de 2015 no es el mejor momento para arrancar la obra. Y así se lo expusieron ayer a la mañana a Enrique Picco, secretario de Vivienda y Desarrollo Urbano de la Comuna, quien los visitó en el Concejo Deliberante para comentarles de qué se trataba el proyecto. Claudia Rocha, del Frente Cívico y Social, y Gustavo Zavala, de Compromiso Federal, aseguraron que la construcción complicará la circulación del tránsito en plena temporada turística y además, afirmaron que hasta el encuentro con el funcionario no tenían en claro qué modificaciones quería hacer el Municipio en una de las principales arterias de la capital.

Claudia Rocha, del Frente Cívico y Social, y Gustavo Zavala, de Compromiso Federal, aseguraron que la construcción complicará la circulación del tránsito en plena temporada turística.

“No nos bastó la explicación, porque nos preocupa esta situación. Yo le planteé que si cierran la avenida en enero, qué vamos a hacer con los colectivos que paran casi todos los días en la Illia con contingentes. Creo que eso es preocupante”, contó Zavala. Y agregó: “Picco dijo que sobre la calle Junín van a hacer la entrada de los ómnibus, pero no es tan ancha y además hay árboles sobre el asfalto. Quizás debería hacerse en marzo, cuando pasen las vacaciones”.

Rocha también manifestó sus dudas sobre cómo solucionarían la circulación del tránsito mientras dure la obra, que de acuerdo al secretario municipal tardará alrededor de 7 meses. Pero el funcionario le explicó que los vehículos tendrán otras alternativas de paso, como la Junín.

En la reunión, que se extendió por alrededor de una hora, los ediles aprovecharon para comentarle al funcionario que no habían recibido precisiones del proyecto y que sólo habían visto el monto de la obra, que asciende casi a $20 millones. “Las dos empresas que se presentaron trajeron sus propias ideas, no era una licitación con proyecto armado”, dijo el titular de Vivienda y Desarrollo Urbano para explicar por qué los concejales no tuvieron hasta ahora datos sobre cuáles serían las refacciones. Aunque la noticia les llegó a los ediles casi de la mano con los trámites de adjudicación y el inicio del plan.

“Básicamente es el cambio de solado de las veredas (colocación de nuevas baldosas) y el ensanchamiento del boulevard central, que en realidad la empresa que ganó la licitación lo denominará la rambla de los jacarandá, porque tendría una nueva forestación en el centro”, explicó Picco, quien destacó que la obra también comprende un nuevo desagüe pluvial que nacerá en Mitre y Pedernera y llegará hasta el cruce de la Illia y Lafinur.

El secretario detalló que si bien la remodelación afectará a toda la avenida, los trabajos se dividirán en dos etapas y la primera incluirá la remodelación del tramo que está entre San Martín y Caseros. Salvo el canal, que lo harán completo al inicio de la refacción.

Para los concejales, otro de los puntos que no estaba claro era el valor total del proyecto. Rocha comentó en el encuentro que el presupuesto que les acercaron detallaba dos montos de 19 y 5 millones de pesos, pero nunca supieron para qué estaba reservado el segundo valor. “Al final lo colocamos en un fondo para que el intendente pueda hacer las obras que crea convenientes durante el año: cloacas en algún barrio, aguas o asfalto”, afirmó Zavala. La decisión surgió luego de las reuniones que el Legislativo municipal organizó con distintos funcionarios de la Comuna para conocer los gastos que tiene previstos la Municipalidad para el 2015. El órgano aprobó el presupuesto con algunos cambios la semana pasada y entre las modificaciones estaba el retiro de una parte del dinero para la remodelación de la avenida.