El municipio presentó ayer en sociedad un plan para revitalizar el casco histórico de la ciudad, un conjunto de obras que se llevará adelante en el área comprendida por Mendoza, Buenos Aires, bulevar Oroño y Tucumán, y que comprende ampliación y nivelación de veredas, remodelación de plazas e instalación de techos livianos en el cruce de galerías comerciales, entre otros trabajos. El programa tiene un plazo de ejecución de dos años y demandará una inversión de entre 50 y 60 millones de pesos. Además, un equipo de inspectores recorrerá todo el área y multará a quienes ensucien columnas, parquímetros y frentes.

Luego del cortocircuito que generó con los comerciantes del área central la sanción de la ordenanza que prohíbe estacionar en 70 cuadras de ese sector (ver página 4), el municipio lanzó un ambicioso plan que buscar poner paños fríos a la relación. El objetivo es cambiarle la cara a la zona más neurálgica de la ciudad, que en los últimos años evidenció un notable deterioro.

La intendenta Mónica Fein puntualizó: "El plan se venía hablando con los empresarios del sector e integrantes de la Asociación Hotelero Grastronómica. Sabemos de la importancia que tiene el casco histórico de la ciudad, de allí que hemos decidido llevar adelante este programa".

El puntapié inicial de las mejoras se dará en dos semanas, cuando se lance la licitación (sin la intervención del Concejo) para remodelar la plaza San Martín, una obra que demandará una inversión estimada en 19 millones de pesos y que permitirá, por ejemplo, ganar un 17 por ciento de espacio verde.

En agosto también se lanzará la licitación para remodelar la plaza Pringles, donde se ampliarán las veredas y quedarán al mismo nivel de la calle. Algo similar a lo que se hizo en el entorno del teatro El Círculo, pero en esta oportunidad se evitará el adoquinado y se colocará un hormigón entramado similar al que se instaló en avenida Luis Cándido Carballo y Francia, donde hay una escultura que simula barquito de papel (a metros de Ciudad Ribera). Hay otras dos plazas en carpeta: Sarmiento y 25 de Mayo.

Proteger al peatón. El plan contempla la ampliación y nivelación de veredas en varios sectores del centro con el claro objetivo de proteger al peatón.

No obstante, para comenzar estas tareas el municipio deberá esperar primero que la Empresa Provincial de la Energía (EPE) defina de qué modo comenzará a renovar el cableado de la red de media tensión del centro. Una obra gigantesca que tiene por objetivo sanear el déficit energético que viene golpeando a esta zona de la ciudad.

Los trabajos derivarán en la rotura de numerosas arterias céntricas, comenzarán en septiembre y de su duración dependerá el inicio del resto de las obras de remodelación en el centro.

Están en carpeta ampliar y nivelar las veredas en el entorno del Hotel Savoy (San Lorenzo y San Martín), del teatro La Comedia (Mitre y cortada Ricardone), del bar El Cairo y del teatro Broadway. También se realizarán idénticos trabajos en el segmento de calle Sarmiento que se extiende entre Santa Fe y Rioja; y de los tramos de Mitre que van desde Catamarca a Tucumán y desde Santa Fe a Rioja.

No obstante, y más allá de las obras de la EPE, Fein destacó que la remodelación del entorno del Savoy y de La Comedia "se realizará este año".

Techos livianos. El plan de obras incluye además la colocación de techos livianos en el cruce de las galerías, de manera que le den una suerte de continuidad a estos paseos comerciales. Los mismos se instalarán en San Martín entre Córdoba y Rioja, en Sarmiento entre Córdoba y Rioja, y en Mitre entre Córdoba y Rioja.

Según precisó la intendenta, para llevar adelante estos trabajos "también se buscarán padrinazgos" , al tiempo que se destinarán recursos propios y del Plan Abre.

Algo es seguro, las garitas de policía que se instalaron en 2002 pasarán a ser parte de la historia, al tiempo que se arreglarán algunos sectores de la peatonales.

Una suerte de nueva impronta que busca cambiarle la cara al casco histórico de Rosario.