La Municipalidad de San Miguel de Tucumán decidió accionar judicialmente contra la Sociedad Aguas del Tucumán (SAT), prestadora del servicio de agua y cloacas, a raíz de un millonario perjuicio ocasionado a la ciudad por las roturas de calles, con fines de obra, que luego no son reparadas.

Berarducci  resaltó que “la actual gestión, desde que asumió el intendente Germán Alfaro, viene teniendo conflictos con la SAT por la falta de planificación de la empresa y la falta de comunicación con el Municipio sobre el accionar directo que realiza a diario en la vía pública”.

El funcionario dijo que la comuna capitalina “padece a diario por las roturas de calles que hace la empresa para arreglar conductos de agua potable y cloacas y que no son reparadas”.

Según detalló Berarducci, “en agosto de 2015 había 800 agujeros realizados por la SAT sin reparar y hoy ya se contabilizan daños por 2.250 pozos, lo que implica un desapego total respecto de la ciudad y de los vecinos por parte de la empresa”.

El secretario de Gobierno municipal dijo que “se decidió acudir al Poder Judicial para corregir este accionar irregular e irresponsable por parte de la empresa”.

Por otro lado, Berarducci recordó que “hay una deuda de 3 millones de pesos que mantiene la SAT con la Municipalidad en concepto de multas, que son la cuantificación de las infracciones detectadas por parte del Tribunal Municipal de Faltas”.

La decisión de accionar judicialmente contra la SAT había sido anunciada por el intendente Alfaro el pasado 1 de marzo, en su discurso de apertura de sesiones ordinarias del Concejo Deliberante capitalino. “Por qué no informan dónde realizarán trabajos, por qué abandonan reparaciones sin terminar, por qué no cierran como se debe los pozos que hacen… Hemos hecho todos los reclamos imaginables y no tuvimos respuestas. La SAT rompe sin control, sin planificación y sin reparación”, exclamó en esa oportunidad el jefe comunal ante los ediles.

La semana pasada, el intendente manifestó que la empresa debería mejorar el servicio antes de plantear un aumento del 35% en la tarifa que les cobra a los vecinos. “El municipio ha perdido debido a las obras inconclusas y roturas. La SAT ha deteriorado las calles, y queremos que se hagan responsables”, se quejó Alfaro.