Ayer arrancó la actividad normal en la Municipalidad tras el receso vacacional de enero. Con la vuelta de la mayor parte de los trabajadores a sus funciones habituales, también los gremios empiezan a movilizarse para lo que se prevé será un año de disputa en lo salarial y en lo laboral.

Por lo que se ha podido conocer ayer, en el Sindicato de Obreros y Empleados Municipales (Soyem) el planteo en materia de aumento de haberes podría rondar el 40 por ciento, con un margen para negociar y llegar a un entendimiento con las autoridades.

En la organización que conduce Marcelino Jara son concientes de que “los sueldos de la Municipalidad son extremadamente bajos” y que los porcentajes que se han conseguido en el pasado “no han sido lo que debiera haber sido. Fue poco para salarios tan bajos”.

Así lo reveló una dirigente de la organización, según la cual ahora están dadas las condiciones como nunca antes para obtener un incremento que sea lo más positivo posible para los trabajadores. “El aumento de tasas que aplicó el gobierno fue muy elevado, calculamos que en promedio es de más del 50 por ciento. Ahora es importante que las autoridades reflejen mucho de ese porcentaje en lo que ganan los municipales”, indicó.

Se recordará que la suba de las tasas comenzó a regir desde el 1 de enero. Desde el Ejecutivo no se dio un porcentaje general pues se arguyó que el incremento se hizo vecino por vecino vía la valuación fiscal de su propiedad.

Soyem es una de las más antiguas entidades sindicales con actividad en la comuna y ha estado siempre en la puja por ser la más representativa por número de afiliados.

En el nuevo Sindicato de Trabajadores Municipales de Cipolletti (Sitramuci) afirman que, pese a tener solamente tres meses de antigüedad, han pasado a ser la organización con más respaldo entre los trabajadores de la comuna. De allí que pedirán pronto ocupar el lugar que les corresponde en las mesas de calificaciones y concursos y de sanciones y disciplina del Municipio.

Omar Meza, referente de la entidad, expresó que para este año se planteará la aplicación del sueldo mínimo vital y móvil, que se ubica hasta ahora en 2.670 pesos y que en febrero se elevará a 2.875. El monto sería la base para después ir acomodando en forma ascendente la escala salarial de acuerdo a cada categoría.

El dirigente mencionó los “bajos sueldos” que existen actualmente en la Municipalidad y destacó su esperanza de “llegar a buen puerto” en las conversaciones que se entablen con el Ejecutivo local.

Dijo también que hay otros dos temas que preocupan a su organización en lo inmediato. Por un lado, para el 15 de febrero está previsto empezar a tratar el pase a planta permanente del personal contratado, que es muy numeroso, habiendo caso de empleados con 28 años en esa situación. Por otro lado, para el mes que viene también se aguarda empezar a discutir la recategorización de los trabajadores, congelada hace 18 años.

En el presupuesto actual de la comuna, que asciende a 205.073.414 pesos, el rubro destinado al personal alcanza la cifra de 100.020.753 (un 48,77 por ciento del total). Para los contratados se prevé invertir 63.990.460 pesos (31,20%), en tanto que los trabajadores de planta permanente tendrán 26.525.287 (12,93%). Los empleados políticos se quedarán con 9.505.006 pesos (4,63%).