Los espectáculos de magnitud siempre traen beneficios a la ciudad, pero también contras. Sobre todo, cuando no hay conciencia sobre el cuidado y el respeto del lugar en donde se está. 

Eso es lo que sucedió en nuestra ciudad, tras el recital de La Renga que tuvo lugar este sábado en las instalaciones del Hipódromo. Allí, los organizadores del show debieron entregar el predio en condiciones, pero afuera, tanto en los alrededores como en plazas y lugares públicos de la ciudad donde los fanáticos se concentraron, la basura reina por todos lados. 

Las imágenes fueron captadas por una vecina que captó la cantidad de basura y desechos tirados sobre el césped de distintos lugares cercanos al Hipódromo de nuestra ciudad. 

Allí, nadie se hace cargo de la basura que miles de personas generan en pocas horas: papeles, vidrios, botellas y restos de comida conforman el paisaje de domingo en la ciudad. 

Hasta ahora, el servicio de recolección brilla por su ausencia. Si el Municipio, que siempre se jacta de los beneficios de este tipo de shows para la ciudad (en materia económica), no se hace cargo ¿quién es el responsable?. 

Basura, suciedad, violencia, heridos, gastos al Hospital Municipal, molestia a los vecinos. Sin dudas, es hora de volver a mirar si realmente, este tipo de eventos benefician a Tandil. Mientras tanto, de la mugre, nadie se hace cargo.