En su dircurso, Molina dijo que fue “una elección histórica” y que “esto recién empieza. Vamos a seguir trabajando por Quilmes. Quiero agradecer a cada uno de los vecinos que nos recibieron en sus casas en todos los barrios, que nos agradecen y nos piden cosas para resolver”. 

“Seguiremos trabajando hasta el 10 de diciembre y vamos a entregar un Municipio ordenado. No vamos a hacer lo que se hizo durante los últimos 20 años, que era esconder los papeles, quemarlos, robarse las computadoras, destruir el patrimonio municipal, romper los camiones. Eso no los van a encontrar en nosotros. Cada peso que se utilizó para mejorar la vida de los quilmeños lo ven, pero además vamos a dejar el patrimonio impecable”, aseguró Molina. 

GESTO POLÍTICO

Por otra parte, el Intendente saliente pidió a su militancia “un gesto enorme que no es común en la política: hacer una transición ordenada en este tiempo. Y repasen todo lo que hicieron en estos cuatro años, agradézcanlo a los vecinos y la mejor manera de hacerlo es trabajar a morir, como nunca, hasta el 10 de diciembre. La política puede ser distinta, puede ser hecha por hombres y mujeres de bien que quieren el bien en serio de nuestra ciudad”.

DEJAR LA GRIETA

“Esperamos que este mensaje lo reciba la oposición con buenas manos para entender que es necesario que pase, de una vez por todas en nuestras provincias, que nos demos la mano todos juntos para construir una sociedad mejor. Ojalá podamos dejar de una vez por todas y para siempre estas grietas que nos separan y generan más violencia. Que la política cambie sus formas y deje atrás esas estructuras perversas que lo único que hacen es dañar a la gente”, concluyó el mandatario local.