El Ministerio de Trabajo realizó inspecciones en distintos sectores municipales

Aún resta una semana de conciliación obligatoria en el marco del conflicto que se había desatado entre el Departamento Ejecutivo municipal y sus empleados afiliados a los gremios ATE (Asociación de Trabajadores del Estado) y del Personal Municipal el mes pasado.
En ese contexto se vienen desarrollando reuniones en el ámbito de la delegación local del Ministerio de Trabajo aunque en forma infructuosa en cuanto a términos salariales se refiere.

Hoy a las 11 horas se llevará a cabo una nueva audiencia en la que se volverán a exponer las posiciones de ambas partes intervinientes en la problemática. Las dos inflexibles. Por un lado, los trabajadores reclaman un incremento salarial sustancial y mejores condiciones de seguridad e higiene y el Ejecutivo, basado en un acuerdo preestablecido este año, sostiene que no están dadas las condiciones económico financieras para afrontar una mejora salarial aunque se muestra a favor de brindar mayor calidad en los ámbitos de desempeño de su personal.

En los términos de las denuncias sobre las malas condiciones de trabajo en la que se encuentran principalmente quienes realizan tareas en áreas como el Cementerio o el Corralón, efectuadas por los gremios ante la resolución del delegado de Trabajo, Marcos Kogan, de establecer la conciliación obligatoria dos semanas atrás, un representante del Ministerio recorrió ayer en la mañana distintos sectores.

"Lo hizo para constatar la veracidad de nuestros reclamos por los cuales habíamos impugnado la conciliación que nos obligaba a trabajar pese a esas circunstancias", señaló el secretario general de ATE, Juan Carlos Zabala, sobre el objetivo de la presencia del funcionario fiscalizador del Ministerio de Trabajo.

El mismo efectuó diferentes constataciones sobre el actual estado de seguridad e higiene que presentan las distintas dependencias del Municipio.

Se labraron actas en las instalaciones del Cementerio local, en el Hogar de Ancianos y el Corralón.

En relación al cumplimiento de los términos de la conciliación que obligaba a ambas partes a retrotraerse al día previo al inicio del conflicto, Zabala dijo que el Ejecutivo "cumplió a medias, mientras nosotros fuimos respetuosos". Según indicó, los descuentos en los salarios que el Ejecutivo había realizado por los paros, fueron devueltos pero no en su totalidad y señaló que de no llegarse a un acuerdo una vez finalizado el período de tregua se volverían a contemplar medidas de fuerza.

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