La popularidad que han ganado los camiones recolectores de residuos de la Municipalidad de Ensenada y la picardía de los dueños de una juguetería ubicada justo frente al palacio comunal, se juntaron para hacer un negoción con un sentimiento que lleva hasta muy cerca del fanatismo a grandes y chicos.
Algunos comerciantes de juegos vieron que los camioncitos que exhibía uno de sus proveedores eran similares a los que utiliza la gestión de Mario Secco para juntar los residuos urbanos. Entonces compraron varios, les colocaron unos calcos a modo de ploteo y los transformaron en un producto casi viral: “El camioncito recolector de la Muni”.
La primera prueba la hicieron los días previos a Navidad, esperanzados en que Papá Noel se llevara algunos y los hiciera conocer para luego poder ir vendiendo el resto.
Pero el gordo de barba blanca y traje rojo arrasó con los vehículos municipales de juguete y generó una interminable lista de pedidos a modo de encargo, que los jugueteros de La Merced y Ferella anotan en una lista previo pago de una seña, para ser entregados a los reyes magos.
Los precios no son muy económicos y populares que digamos, pero el furor que despertaron los camioncitos verdes entre los chicos y también adultos, hizo que la familia propietaria del local que los vende, encargara cientos de camiones y calcos para calmar la ansiedad de miles de ensenadenses fascinados con su intendente.
Tanto es así que los jugueteros estarían pensando en producir y patentar este y otros varios productos de esa índole, como las cuadrillas de obreros municipales, los micros comunales, los camiones y personajes plásticos de los queridísimos bombeos voluntarios locales en acción y hasta un muñeco del propio jefe comunal Mario Secco.
Los costos del camioncito, para Navidad, son los siguientes: El más chico tiene valor de $500, el mediano $1.200 y el más grande $2.000.
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