Tal como detalló RevistaQue.com, el jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, puso en marcha la segunda etapa del Plan Director de Ordenamiento Hidráulico, que tiene por objetivo mitigar las inundaciones en la zona norte de la Ciudad generadas por el Arroyo Vega cuando hay fuertes precipitaciones.

 

Este viernes fue publicado en el Boletín Oficial la adjudicación de la licitación pública internacional al consorcio de empresas formado por Benito Roggio e Hijos SA – Jose Cartellone Construcciones Civiles SA – Supercemento SALC, por un monto total de $ 1.568.005.493,81, más U$S 10.140.001,78, y € 25.729.125.79.

Teniendo en cuenta una cotización promedio de 14 pesos por cada moneda extranjera, la suma aproximada a invertir es de $2.212.133.304,71 , muy superior a los 135 millones de dólares que se habló en un principio y que significarían unos 1.890 millones de pesos.

El inicio de la obra está pautado para agosto próximo, con tiempo de ejecución de 32 meses. “El objetivo es incrementar la capacidad del emisario actual mediante un segundo túnel, aumentar la captación de agua gracias a la instalación de nuevos sumideros y conectar los principales ramales a través obras de derivación de descargas laterales”, añadieron.

El segundo emisario estará dividido en dos tramos y tendrá en total una longitud de 8.400 metros. Los primeros 2.400 metros se realizarán mediante métodos de excavación en galería, mientras que los 6.000 metros restantes se completarán con tunelera, un sistema usado para la construcción de los dos túneles aliviadores del Arroyo Maldonado.

“Para el primer año, están previstos los ramales Cabildo, Donado, Elcano y Victorica, además de los sumideros, mientras el segundo abarca los ramales Álvarez Thomas, Balbín, Constituyentes y la finalización de Elcano. El tercer año, asimismo, tiene planificado los ramales Delgado, Freire, Lugones, Roseti, Sucre y Tronador”, detallaron.

De esta manera, si el plan se cumple en tiempo y forma, Rodríguez Larreta finalizaría su mandato con la obra concluida y le servirá como caballito de batalla en las elecciones de 2019, cuando de seguro buscará renovar su mandato por cuatro años más.