Un millar de niños disfrutaron del teatro evocando el día mundial de la alimentación

Bajo el lema: “Agricultura familiar para alimentar al mundo y cuidar el planeta”, es que durante toda las semana pasada se desarrolló una nutrida agenda de trabaja en varios puntos de la geografía provincial para celebrar el Día Mundial de la Alimentación. Es por ello que el Equipo de Nutrición del Ministerio de la Comunidad, organizó una recorrida por Herradura, Pirané, Clorinda y Capital mostrando la obra de teatro “Narices Rojas”, que pertenece a la Subsecretaria de Políticas Alimentarias del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación.

La nutricionista Mónica Ferreira, explicó que el objetivo de las actividades desarrolladas era crear conciencia sobre la importancia de mantener una buena alimentación en la comunidad para así tener una buena calidad de vida. Recordó que el Día Mundial de la Alimentación fue proclamado en el año 1979 por la Conferencia de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) y coincide justamente con la fecha de fundación de la FAO en 1945.

Ferreira agregó que la garantía de una alimentación saludable depende no sólo de soluciones de carácter profesional o técnico sino que deben intervenir políticas públicas que abarquen el conjunto de la problemática alimentaria, desde el modo de producir, de comercializar y de distribuir, hasta la llegada del alimento a la mesa cotidiana.

Antes de cerrar la gira en las instalaciones del Galpón “C” del paseo costanero, el Ministro de la Comunidad, Telésforo Villalba explicó que la alimentación es considerada hoy un derecho de todos los ciudadanos y por ello debemos trabajar arduamente para que todos en la provincia tomen conciencia sobre el tema. “El Día Mundial de la Alimentación pretende despertar la conciencia de todos para así luchar contra el hambre, la malnutrición y la pobreza en la que viven muchas personas en todo el mundo y nosotros desde esta parte trabajamos para que nuestra comunidad aprenda cómo alimentarse, para ello tenemos políticas públicas que se encargan del tema con profesionales en la materia que aportan toda su experiencia y la vuelcan en el terreno”.

En ese sentido Villalba explicó que no solamente se trabaja en el cuidado de los niños sino que a su vez se trabaja con la alimentación de los niños controlando con los especialistas el normal desarrollo físico y con los nutrientes necesarios, “en los CDI se brinda el desayuno, almuerzo, merienda y colaciones, que permiten el crecimiento y normal desarrollo de los niños, realizando pesajes comunitarios todos los meses para tener un mejor control de la evolución de los niños”. La alimentación es fundamental para la supervivencia humana y es imposible vivir más de unas semanas sin comer nada. Además, la comida es un rasgo identificativo de las culturas y sirve como vínculo de unión entre la gente y por sobre todas las cosas “el acceso a la alimentación es un derecho reconocido por la Declaración Universal de Derechos Humanos”, finalizó.

Narices Rojas

La obra teatral tiene como objetivo central sensibilizar a niños, niñas y adultos en torno a la importancia de una buena alimentación. Para el diseño del espectáculo se trabajó con la temática de alimentación y nutrición a través de contenidos de las Guías Alimentarias: grupos de alimentos, higiene de los mismos, consumo de agua potable, y actitudes y conductas a tener en cuenta a la hora de la comida.

La temática se desarrolló mediante el género de clown, donde el espectador queda identificado por las situaciones planteadas. Se buscó que los participantes de la obra se sumerjan en el mundo mágico del teatro y puedan, a partir de vivenciar una experiencia artística, generar aprendizajes que se vuelvan significativos en la vida cotidiana.

Esta obra de teatro acompaña desde hace años las acciones relacionadas con la Educación Alimentaria Nutricional que el Plan de Seguridad Alimentaria lleva adelante. Su finalidad es generar espacios para compartir y poner en valor las prácticas de cuidado alimentario, proponiendo revalorizar la mesa familiar y reflexionar sobre los grupos de alimentos, sus características y recetas; abriendo posibilidades de aprendizaje, construcción y transmisión de saberes en las familias, sus comunidades y entre comunidades.

De este modo, la propuesta promovió el desarrollo de adecuadas pautas alimentarias, los buenos hábitos de nutrición y de salud, y fundamentalmente, cómo hacer del lugar y el momento de la comida un espacio acogedor y agradable. La Educación Alimentaria Nutricional es un proceso dinámico a través del cual los individuos, las familias y su comunidad adquieren, reafirman o cambian sus conocimientos, actitudes, habilidades y prácticas, actuando racionalmente en la producción, selección, adquisición, conservación, preparación y consumos de los alimentos, de acuerdo a sus pautas culturales, necesidades individuales y a la disponibilidad de recursos en cada lugar.

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